"La gente no anda muy alegre comprando" y "aún se nota la tristeza en las ventas". Estas dos reflexiones fueron escuchadas ayer entre consumidores y vendedores de pescados y mariscos, cuya tradicional subida navideña de precios parece este año menor que de costumbre.

Es cierto que algunos productos han encarecido su precio respecto a semanas previas, como sucede con el centollo, lo cual es achacable a su escasez en la presente campaña. Pero también lo es que la mayoría de los productos estrella en Navidad están ahora mucho más "asequibles" que de costumbre.

En líneas generales puede hablarse de una subida tímida y, en cualquier caso, muy irregular, ya que hay puntos de venta donde los precios se mantienen inalterables y sorprendentemente bajos, como si del mes de noviembre se tratara.

En Vilagarcía, por ejemplo, ayer se celebraba el tradicional mercadillo ambulante, y eso, supuestamente, es sinónimo de un aumento de ventas en la plaza de abastos. Pero las pescantinas consultadas esgrimían a media mañana que "no hay dinero, la crisis aún hace estragos y la gente no se anima a comprar; ni siquiera la proximidad de la Navidad nos está ayudando".

En este mercado los profesionales sostienen que "puede verse mucha gente por la plaza -como sucedía ayer-, pero no se vende como antes; algunos acuden solo a mirar y otros buscan los productos más asequibles, pero ya ni siquiera se preparan los pedidos de varios cientos de euros en los que nos encargaban centollas, nécoras, camarones y cigalas para las cenas de empresa previas a la Navidad".

Esta circunstancia, explican las placeras, se nota tanto en el caso del consumidor como entre los clientes más potentes, es decir, los restaurantes que compran en las plazas de abastos, "pues en las cenas navideñas también se han recortado mucho los presupuestos y eso implica que ya no nos compran tanto pescado y marisco".

La situación llega a tales extremos que algunas vendedoras de la plaza vilagarciana han dejado de adquirir mariscos en lonja "porque después no tienen salida y perdemos muchos dinero", de ahí que prefieran limitarse a comercializar productos "de a diario", que poco o nada tienen que ver con los pescados y mariscos de las mesas navideñas propias de las épocas de bonanza.

Respecto a los precios, todas las vendedoras del mercado municipal de abastos de Vilagarcía consultadas por FARO coincidían ayer al señalar que "siguen bajos, con excepciones como la almeja, que si la semana pasada se vendía a 15 ahora sale a 19; la merluza, que subió hasta los 13 euros el kilo; o la centolla, debido a que hay muy poca".

Peregrina Abad Sabarís, de Pescados y Mariscos Sabarís, manifiesta que "prácticamente no se ha notado diferencia alguna respecto a las anteriores semanas, y en nuestro caso estamos vendiendo el centollo de la ría de primera calidad a unos 27 euros".

En este puesto también vendían ayer la nécora a 30, el camarón mediano a 50 euros el kilo, las navajas a 12 y el buey, que "subió ligeramente", a 9 euros el kilogramo.

"De momento no se nota la subida habitual de precios antes de Navidad, y a este paso ya no creo que aumenten mucho", concluía Peregrina Abad.

En ello también coincide Blanca Cao, presidenta de la asociación de vendedores de la plaza de abastos de O Grove y una de las pescantinas que trabajan en dicho mercado. "Por ahora todo sigue más o menos igual, y desde luego los precios no se parecen en nada a los de otros años en vísperas de Navidad", argumenta la grovense.

En su caso el centollo oscilaba ayer entre los 20 y los 30 euros, mientras que el lenguado se vendía a 17 euros el kilo, el sargo a 12, la lubina a 15, la nécora grande a unos 42 euros y el camarón, a 120 euros el kilo, también grande.

En Pescadería Caipo, situada en la calle Serafín Avendaño de Vigo, aseguraban, por el contrario, que "los precios subieron muchísimo a causa del temporal y la escasez de producto", a lo que añadían que se nota especialmente en especies como el centollo, la lubina y el besugo.

José Piñeiro, director comercial de Pescados Pérez Piñeiro, que se dedica a la venta a mayoristas desde el puerto de Vigo, señala que "la carencia de centolla hizo que subiera su precio y se vende a 40 euros, cuando lo lógico a estas alturas sería que estuviera a 20 o 25, en caso de que existiera la abundancia de otros año". En cualquier caso, "en líneas generales se nota que los precios no tiraron hacia arriba; puede decirse que las ventas están tristes".

Piñeiro pone como ejemplo que "el lenguado está a entre 13 y 18 euros, y la lubina oscila entre los 13 y los 20, es decir, precios normales, como cualquier otro mes".

A su juicio, "puede que no se produzcan cambios excesivamente llamativos en próximos días, pues la Navidad está ahí, a la vuelta de la esquina, y repito que las cotizaciones siguen muy bajas en relación con otros años; tanto que otras veces ya subían a principios de diciembre, y sin embargo hay muchas especies que se cotizan ahora, en la recta final del mes, igual que en noviembre u octubre".

Para terminar esta ronda de consultas efectuada ayer en diferentes puntos de venta, puede decirse que María del Carmen Ramos, una vecina de Rianxo propietaria del puesto Mariscos Carmen, en la plaza de abastos de Santiago, habla de una ligera subida en especies como la almeja, pero sobre todo de que "la crisis se nota una barbaridad en las ventas".

En este caso vendía ayer la centolla a 30 euros, la almeja babosa grande a 22, el camarón grande a 100 y el mediano, a 50 euros el kilo.

Y acto seguido cabe aludir a las lonjas de contratación, donde se confirma lo expuesto anteriormente en el sentido de que las subidas de precios son muy irregulares, y la tendencia generalizada habla de una contención de las cotizaciones, quizás porque la demanda, a causa de la crisis, se ha reducido.

Dado que algunas lonjas tardan incluso semanas en hacer oficiales los datos de venta se han tomado como referencia algunas que han remitido ya a la Plataforma Tecnológica de la Pesca de Galicia las cotizaciones de los últimos días. En este sentido, en la lonja de O Grove productos como la merluza, el pulpo o el rodaballo han mantenido o incluso rebajado su precio en la subasta del lunes, respecto a las cotizaciones de la primera semana de diciembre.

La babosa, por su parte, se subastó el lunes dos euros más cara por kilo que a comienzos de mes, la almeja fina subió 7 euros, la mejor navaja costó solo un euro más y la centolla se vendió el lunes a 29,25, frente a los 24,60 que marcó -siempre como precios máximos- el pasado día 2.

Lo que más se ha encarecido en el puerto de O Grove ha sido el camarón común, con una subida de 20 euros por kilo, mientras que en A Illa el mismo producto costó el lunes 17 euros más que a comienzos de mes.

Por su parte, en la lonja de Vigo-Canido, especies como la merluza, la navaja o la almeja mantuvieron el viernes las mismas cotizaciones que el día 2, o incluso las rebajaron, registrándose incrementos de apenas un euro para el lenguado en la lonja de Vigo.

En resumen, que las subidas que se han producido en determinados productos no sirven para apreciar el brusco incremento de tarifas de cada período prenavideño. Muy por el contrario, la mayor parte de las especies se mantienen en cotizaciones bajas y asumibles, si es que este último calificativo puede utilizarse en tiempos de crisis como los que corren.