La jornada de ayer dio para mucho. Los excursionistas vieron los fondos marinos del islote Areoso, y también observaron el trabajo de los bateeiros y los pescadores de camarón. Incluso contaron con la presencia del campeón olímpico de vela Antón Paz y de su hermano Carlos, que fueron hacia Rúa con su embarcación, a la que se subieron los cocineros. "Fue un reto. Ellos subían con nosotros -explica Antón Paz- y nosotros les ayudábamos a hacer la comida".

El regatista se mostraba impresionado con la belleza de la isla rocosa de Rúa y de sus acantilados, pues nunca había estado en ella, aunque sí navegó muchas veces por esa zona. Fue allí donde comieron unos mejillones que les habían dado los bateeiros y una empanada que habían encargado en A Illa, y que subieron a bordo mientras contemplaban el trajín del muelle de O Xufre. Todo ello emplatado y decorado con productos encontrados por los cocineros entre las rocas de Rúa.

También el cocinero Quique Piñeiro, que fue Premio Nacional de Gastronomía en 2011 se mostraba encantado "porque el producto turístico es muy interesante. Tenemos que potenciar lo que tenemos cerca y que a menudo no valoramos como se merece. Yo hoy (por ayer) he vivido muchas experiencias que no esperaba, como la de ver desde un barco a la gente trabajando en el mar".

En opinión del chef, la improvisación -como en el reto con los regatistas- y las sensaciones que tuvo al subir al barco de los Paz, momento en el cual notó una mezcla de "emoción y miedo" es de lo mejor de este tipo de iniciativas. "Tenemos gastronomía, deportes, patrimonio... mucho que ofrecer", concluye.

El viaje fue grabado por la productora Aeromedia, que tomó imágenes tanto de los paisajes por los que pasaban como del trabajo de los profesionales que componían la expedición. "Es una pena que no se ponga más en valor todo lo que tenemos en Galicia, porque es impresionante".

La jornada concluyó, bien entrada la tarde, con un brindis de vino albariño en el pazo de Rubiáns, que elabora sus propios caldos.