Atadas y amordazadas. Así permanecieron ayer durante varias horas dos mujeres en una vivienda situada en la calle Xesta de la urbanización O Rial (Vilagarcía) que pertenece a un histórico del narcotráfico, José Ramón Dorgambide Casais "Panadero". El suceso finalizó con la quema de uno de los vehículos de la familia en una pista forestal de Meis.

Según fuentes de la investigación, la retención de las dos mujeres, la esposa de José Ramón Dorgambide Casáis y su asistenta, ocurrió por la mañana, cuando se encontraban en el interior de la vivienda y llegó un repartidor de una empresa de mensajería para entregarles un paquete. Dos encapuchados se introdujeron en la vivienda aprovechando que la mujer de José Ramón Dorgambide Casáis abrió la puerta, siendo inmediatamente atadas y amordazadas, estado en el que permanecieron durante varias horas, mientras los asaltantes registraban en profundidad la casa.

En esa labor permanecieron hasta las 17 horas, cuando abandonaron la vivienda llevándose consigo dos vehículos de alta gama, un Audi A8 y un Audi A6. Pese a quedarse solas, las mujeres optaron por llamar a sus familiares y a sus abogados antes de recurrir a la Policía Nacional, cuyos agentes llegaron sobre las 18 horas a la vivienda de O Rial.

Precisamente sobre esa hora, saltaba la alerta en la sede del parque comarcal de Bombeiros de Vilagarcía. Vecinos de Vilanoviña, en el municipio de Meis, avisaban de la presencia de un vehículo incendiado en una pista forestal. Cuando llegaron los bomberos a la zona se encontraron con un Audi A6 pasto de unas llamas avivadas con un acelerante. Cuando acabaron de extinguir el fuego, del coche apenas quedaba el chasis totalmente calcinado.

Un incendio provocado en una pista de la parcelaria muy poco transitada y la ausencia de placas de matrícula llamaron la atención de los agentes de la Guardia Civil de Tráfico, que intervinieron en el lugar. Los agentes comenzaron a investigar sobre la propiedad del mismo a través del número de bastidor y ahí fue cuando se cruzaron las investigaciones y dos sucesos que, aparentemente, no tenían nada que ver, se relacionaban y todo el caso pasaba a manos de la Policía Nacional.

Mientras las últimas llamas del vehículo se extinguían, los agentes de la Policía Nacional de Vilagarcía realizaban un minucioso registro en el interior de la vivienda, comprobando que el móvil del asalto, según apuntan fuentes de la investigación, no parecía ser el robo, ya que los encapuchados no sustrajeron joyas ni dinero ni tampoco objetos de valor del interior de la casa.

Por este motivo, todo apunta a que pueda tratarse de un ajuste de cuentas o de un chantaje vinculado al tráfico de drogas, teniendo en cuenta que el marido de una de las presuntas víctimas está ingresado en la cárcel de A Lama tras haber sido detenido por narcotráfico. No obstante, no se descartan otras líneas de investigación.

Los agentes de la Policía Nacional todavía permanecían en el interior del chalé de O Rial sobre las 22 horas recogiendo todo tipo de pruebas que permitan localizar a los encapuchados que asaltaron la vivienda, aunque las dos víctimas aportaron muy pocos datos sobre las personas que las mantuvieron retenidas durante varias horas.

José Ramón Dorgambide Casais "Panadero" o "Monchi", de 43 años de edad, permanece en prisión tras haber sido detenido en León en junio de 2012 después de meses fugado al no comparecer en el juicio que se celebraba en la Audiencia Nacional. Dorgambide está considerado por las fuerzas de seguridad como uno de los lugartenientes de David Pérez Lago -hijo de Esther Lago e hijastro de Laureano Oubiña-, junto al que fue detenido en abril de 2006 por su implicación en el desembarco de 6.000 kilos de cocaína en la Costa da Morte.

Dorgambide participó en las dos operaciones que tuvieron lugar entre el 5 y el 25 de abril de 2006, en la que el hijastro de Oubiña era el encargado de coordinar cómo y dónde debían encontrarse la embarcación que traía la droga y la que la acercaría a tierra. Problemas técnicos acabaron frustrando aquella operación, pero el grupo que capitaneaba Pérez Lago volvió a intentarlo de nuevo unos días más tarde, tratando de introducir cerca de 2.000 kilos de cocaína por las playas de Corme, pero las fuerzas de seguridad del Estado frustraron la operación por la que Dorgambide fue condenado a siete años de prisión.

El vilagarciano también formaba parte de una trama que estafaba a sus clientes en la venta de vehículos de alta gama en tierras de Santiago de Compostela, en la que también participaba el hijastro de Oubiña.