O Grove se ha convertido en el primer ayuntamiento arousano en acoger un bautizo civil. El niño que ha estrenado los denominados acogimientos civiles fue el grovense Jairo Benavides, un vecino de A Graña con un año de edad. El Concello organizó la ceremonia ayer a mediodía en el Museo de la Salazón, donde los padres y padrinos de Jairo se comprometieron a velar por su educación y a inculcarle valores como la libertad, solidaridad y justicia.
El acogimiento civil consiste en un acto que da la bienvenida a una persona a la comunidad. Haber recibido un acogimiento civil "no supone ningún privilegio en relación a otros niños", explica la teniente de alcalde, Ayda Filgueira, que se encargó de oficiar la ceremonia.
El acto, al que asistieron en torno a unas sesenta personas, comenzó con la lectura de varios artículos de la Constitución Española y de la Declaración de los Derechos del Niño de 1959. Filgueira también hizo alusión a la Convención de 1989 y al Pacto Galego pola Infancia de abril de 2011.
Luego le tocó el turno a niños familiares de Jairo, que procedieron a la lectura de textos elaborados por ellos mismos y de otros más conocidos como el Principito. También hubo espacio para la poesía gallega. No podían faltar versos del poeta Manuel Lueiro Rey, afincado y fallecido en O Grove. De ello se encargó Gabi, un familiar de Jairo.
El de ayer fue un emotivo acto, a la vez que participativo. Aparte de las variadas intervenciones durante el bautizo civil, el acto estuvo amenizado por el grupo de cuerda y púa "Faísca do Cordel". Inauguraron la ceremonia interpretando el himno del antiguo Reino de Galicia y la cerraron con una muiñeira. En medio, la mítica canción "My way" sonó en el Museo de la Salazón.
Hasta ayer, el Rexistro Municipal de Acollementos Civís estaba vacío. Fue Jairo Benavides el que estrenó este registro con su nombre y apellidos. Se extendió un acta en el que firmaron sus padres y padrinos.
La posibilidad de celebrar bautizos civiles depende de cada ayuntamiento. En el Concello de O Grove la corporación aprobó en pleno una moción presentada por Esquerda Unida, lo que permitió que la correspondiente ordenanza entrase en vigor hace unos meses, concretamente en marzo.
