Los tres grupos de la oposición de la Corporación de Vilagarcía dieron ayer una imagen de unidad compareciendo conjuntamente para ofrecer una misma versión de los altercados ocurridos en el pleno del lunes, que tras dos horas celebrándose tuvo que suspenderse. PSOE, BNG y Esquerda Unida exigen de forma unánime al alcalde, Tomás Fole, que cese de sus funciones al concejal de Cultura, Francisco González, por su "incapacidad de desarrollar sus obligaciones" y su actitud en la última sesión plenaria, en la que, según la oposición, desafió a los colectivos "para afrontar los problemas y ocultar su falta de capacidad".

Las fuerzas políticas encargadas de fiscalizar la labor del gobierno vilagarciano aseguran estar "muy preocupadoas por la deriva" del Ejecutivo municipal que, aparte de "faltar al respeto" a la ciudadanía -dicen- también lo hacen con la oposición, a la que tampoco entregaron el texto definitivo del reglamento de uso de instalaciones culturales que el edil de Cultura leyó en el pleno, una actitud que indignó a los colectivos y a los partidos. "No nos entregan informes ni documentación", resume la portavoz socialista, Tania García, quien exige al equipo de Fole "que regrese a la normalidad democrática que se perdió por el poco talento y talante del alcalde".

Por su parte, la portavoz del BNG, María Villaronga, insistió en la "deriva y falta de gestión del gobierno", el cual, en su opinión, "falla constantemente en algo tan básico como es el diálogo con la ciudadanía". En este mismo sentido se pronunció el edil de Esquerda Unida Ramón Bueno, quien reiteró que lo único que pedían los colectivos era consenso, "una palabra que ni Fole ni González conocen".

Bueno respondió con duras críticas a las declaraciones emitidas por el alcalde y el concejal de Cultura tras el pleno. El edil de EU afirmó que "en ningún momento se le insultó" -en alusión a Francisco González-, sino que "fueron los vecinos, quienes hacen cultura con muy pocos medios, quienes se encontraron con este desprecio e insulto", atendiendo a la lectura del concejal de las alegaciones aceptadas y a su falta de diálogo previo con las asociaciones.

María Villaronga, del BNG, criticó a González por "mentir y su tono prepotente" a la hora de dirigirse a las entidades. "Este gobierno insulta constantemente a la inteligencia de las personas", dijo la portavoz nacionalista.

Los ediles de los tres grupos de la oposición aseguraron que solo ingresarán la indemnización por uno de los dos plenos celebrados.