-¿Qué hace un cordobés estudiando la zarzuela gallega?

-Le contestaría con una pregunta, discúlpeme. ¿Qué hacen los gallegos que no investigan su patrimonio musical? Llevo 30 años en Galicia y me sorprende que no se haya hecho ninguna tesis sobre la zarzuela gallega hasta que la publiqué yo.

-¿Cómo se perdió el rastro de esta zarzuela durante décadas?

-Uno de los elementos propios del franquismo era el uniformizador del Estado, que tenía que ser centralista. La última vez que se representó fue en 1956. El desarrollismo de los 60 no aceptaba estas variantes "enxebres". La cultura se hizo más general, basada en el sur.

-¿Qué significó para usted ver reestrenada esta obra?

-El domingo pasado viví momentos de enorme emoción en Pontevedra. Me costó salir al escenario cuando me sacaron. Han sido muchos años de investigación, no pocos en Vilagarcía entrevistando a muchas personas. Ahora solo pienso en cuál será la siguiente localidad en la que se estrenará "A lenda de Montelongo" y cuál será la siguiente zarzuela que luche por poner de nuevo sobre el escenario.

-Debe ser especial verla representada en Vilagarcía.

-Mucho. La última vez fue en el año 1953. Han pasado sesenta años. Para mí es una obra fundamental en mi vida, el paradigma de la zarzuela gallega y su autoría es totalmente vilagarciana. Invito al público a que asista a la representación. No se arrepentirá y descubrirá una obra con un trasfondo social muy interesante y divertidísima. En Pontevedra hubo carcajadas continuas.