La aprobación de la "Ordenanza fiscal reguladora del precio público por la prestación de servicios de utilización del Auditorio y otras instalaciones del Concello" mantiene en pie de guerra a los colectivos culturales, convocados en masa para que hoy estén presentes en la votación de este punto incluido en el Pleno ordinario.

En total son 36 colectivos los que firman el escrito en contra del cobro por la utilización del dichos espacios, pero el número de adhesiones ha crecido de forma exponencial como demuestra el hecho de que se entregaran 2.700 firmas en el Registro municipal.

La aprobación de esta ordenanza coincide con un momento crítico para el gobierno local de Tomás Fole debido a la crispada sesión anterior porque la policía municipal identificó al público presente.

En esta ocasión, Fole ha optado por suspender estos controles tan exhaustivos por lo que solo ha requerido que se extreme la vigilancia acerca del aforo, dado que solo podrán acceder al salón noble unas 140 personas.

Xurxo Abuín, como portavoz de los colectivos antes aludidos, asegura que los colectivos harán acto de presencia en el pleno sin ánimo de generar conflictos.

"Si cabemos todos, estupendo, y en caso contrario, los que no pasen se quedarán a las puertas de Ravella" razona Xurxo Abuín quien también recordó que ya propuso que la sesión de hoy se llevara a otro edificio más espacioso que la Casa Consistoiral.

Los colectivos celebraron varias reuniones sobre la situación, ya que la ordenanza fiscal regula no solo precios por el uso de las instalaciones sino que también se refiere a otras actividades, onerosas o no, que se desarrollen en los principales espacios públicos como el Auditorio o el Salón García, y a las concesiones que se han hecho en los numerosos centros socioculturales de las parroquias.

El alcalde reiteró que la ordenanza especifica que los centros son gratuitos para entidades sin fin de lucro.