Deu Txakartegui es el vocalista del grupo vizcaíno We Are Standard, uno de los platos fuertes de la segunda jornada del Festival do Norte (FDN). Con letras en inglés y un sonido mezcla del pop inglés, el rock y la sicodelia, esperan volver a triunfar por tierras vilagarcianas.

-¿Qué se va a encontrar el público con su espectáculo "Great State"?

-Para este disco buscamos una mezcla entre el pop, la sicodelia de los 60 y 70 y el house. Queríamos hacerlo así para unirlo y que saliera algo explosivo.

-Sus directos son muy populares. ¿Qué tienen de especial?

-Básicamente buen rollo. Hacemos conciertos para que la gente vaya a bailar y a saltar. Son algo que no te deja indiferente, Nosotros hacemos el 50%, el público el otro 50.

-Conocen bien Galicia. Parece que les va a tocar actuar con lluvia. ¡Estarán acostumbrados, son de Bilbao!

-Galicia nos gusta y no tenemos queja, ni siquiera de que llueva. No es ningún problema. No somos andaluces, que si caen cuatro gotas no salen de casa. Últimamente llueve tanto que nos van a salir las agallas.

-Volviendo a sus trabajos de estudio, ¿por qué pasa tanto tiempo entre un disco y otro?

-Porque buscamos un cambio y eso no es fácil. Hay que estar muy seguro. En el caso de "Great State" fue como una travesía en el desierto. Pasamos meses en los que no sabíamos ni qué queríamos tocar. Ni siquiera si el grupo iba a seguir. Bueno, al final vimos la luz al final del túnel.

-¿Realmente llegaron a pensar en irse para sus casas?

-No. Pero pensamos que habíamos llegado al final de algo.

-En estos últimos años se han hecho muy populares. ¿Cómo se lleva esa condición?

-Siempre ha habido gente que nos ha seguido, no creo que ahora haya más. Cada vez actuamos en más sitios, pero tampoco hacemos más conciertos que antes. Ni antes nos costaba llenar una sala de 100 personas ni ahora petamos otras de 2.000.

-¿Es buena la relación con sus fans?

-Fenomenal. Hacemos todo lo que podemos por ellos. Hace unos días elaboramos un vídeo para una chica que se lo quería regalar a su amiga por su cumpleaños. No podríamos dedicarnos a la música sino tuviéramos gente detrás nuestra.

-¿Les afecta la crisis?

-Se lleva mal. Y si encima te imponen el 21% de IVA en las entradas, peor. Está siendo una temporada difícil. No somos una excepción, también estamos fastidiados. Pero hay que aguantar el tirón.

-¿El hecho de cantar en inglés les facilita las cosas en el extranjero?

-Cantar en inglés fue una decisión estética. No creo que facilite las cosas fuera. En Inglaterra piensan, vienen estos a hacer lo que inventé yo. El punto exótico de cantar en castellano les gusta. Si vas allí a hacer lo mismo que ellos piensan que está bien, pero que ya tienen grupos así.