Los ánimos entre las trabajadoras de Cuca estaban ayer por los suelos. Garavilla acaba de comunicar a doce empleadas que el lunes deben incorporarse a la planta de Isabel, en O Grove. En esta nueva remesa se incluye a las delegadas sindicales que faltaban por trasladarse a la factoría grovense, lo que ha motivado que la plantilla haya decidido abandonar este fin de semana las guardias que hacían 24 horas -en turnos- en la caseta ubicada frente a la fábrica de Vilaxoán.