Gonzalo Pérez, profesor del centro, trabaja actualmente en el estudio de la cría y engorde en cautividad de la centolla. "El problema con el que nos encontramos es que son muy caníbales. Si las juntamos sobreviven menos del uno por ciento. Separándolas hemos tenido mucho éxito, pero es muy costoso. En año y medio crecen totalmente. Quizás la solución sea la cría extensiva, en espacios más abiertos", teoriza.