Evitar que se pierda el valioso espacio dunar del islote Areoso es una de las principales prioridades que se ha marcado el Concello de A Illa, motivo por el cual apremia a la Consellería de Medio Ambiente para restituir las vallas que protegían estas zonas arenosas hasta que los temporales se las llevaron por completo.

El Concello alertó de esta situación a Medio Ambiente a mediados de abril, tras comprobar que todo el vallado que rodeaba las dunas para evitar limitar el acceso de los turistas al islote había desaparecido por los efectos de la meteorología.

El objetivo es que estas vallas se instalen antes de que comience el período estival, cuando el islote es uno de los puntos donde se concentran un mayor número de visitantes, que se acercan en los barcos de pasaje o en embarcaciones de recreo para disfrutar de esta pequeña lengua arenosa que se encuentra en pleno centro de la ría de Arousa.

La presencia de las vallas se había convertido en un elemento disuasorio para los visitantes que evitaba que pudiesen dañar el espacio dunar por eso el Concello ha intensificado los contactos con Protección da Natureza, entidad con la que existe una buena dinámica colaboradora a la hora de proteger Areoso, tendentes a corregir la "desfeita" que se ha registrado en el islote durante el invierno.

Si la agresión turística es la que más preocupa, el islote acostumbra a sufrir las meteorológicas, ya que cada invierno el Areoso se expone a las mareas vivas y a los temporales, que además de destrozar las protecciones también provocan importantes cambios en su morfología.

De hecho, en los últimos años es habitual que las mareas partan en dos la pequeña lengua de arena, y desde 2005, año en el que se instalaron las primeras vallas de protección, han tenido que ser sustituidas con cierta frecuencia al acabar desapareciendo víctimas de la voracidad del mar.

La mejora en el vallado dunar fue una de las medidas que se han reclamado insistentemente por parte de A Illa en los últimos años, para proteger uno de los espacios naturales más importantes que posee el municipio. Hace tres años, cofradía y Concello se aliaron para frenar las constantes invasiones de turistas que sufría el islote Areoso cada verano; visitas que ponían en peligro la importante riqueza natural, los restos prehistóricos que se han hallado en el mismo y los bancos marisqueros que gestiona el pósito isleño, pues el entorno de Areoso es uno de los puntos más valiosos para la economía del municipio arousano.