Una familia de O Grove que reside en el barrio marinero de Virxe das Mareas decidió sacar los muebles de su casa al exterior y, tras depositarlos momentáneamente en la acera, decidió finalmente arrojarlos a la playa.

Los hechos causaron enorme preocupación e incluso estupor, propiciándose un clima de tensión que dio lugar a varios enfrentamientos entre los ciudadanos autores del vertido y otros vecinos que les reprocharon su actitud. La situación fue por momentos tan tensa que se hizo necesaria la presencia policial.

Finalmente el Concello, por medio de la concejalía de Limpieza y Protección Civil, se hizo cargo de la recogida de los enseres que habían sido arrojados sobre la arena, procediendo además a la apertura del oportuno expediente.

Los muebles lanzados desde el paseo de Virxe das Mareas a la arena de la playa eran unas mesas, sillas y sofás viejos y visiblemente deteriorados. La familia responsable de estos hechos es muy conocida en la localidad, pues es de esas unidades familiares que suelen tacharse de "marginales" y que acostumbran a protagonizar altercados con frecuencia. Sus miembros acumulan una larga lista de antecedentes policiales y penales, siendo responsables de faltas y delitos de todo tipo, por lo que apenas necesitan presentación en la localidad grovense.

A modo de ejemplo, puede decirse que los miembros de esta familia fueron acusados de tirar contenedores de basura sistemáticamente para verter el contenido en la calle, pero también de apedrear coches y personas y de perseguir a otro vecino y golpearlo en la cabeza con una azada. Hace años el Concello retiró de la vivienda varios perros que vivían en condiciones lamentables y recogió casi una tonelada de basura. Más recientemente les llamó la atención por haber colocado ya algunos muebles en la vía pública.

Los equipos de emergencia y efectivos policiales desplazados ayer al lugar indican que esta familia había acumulado sus enseres en la acera. Parece que cuando otros vecinos se enfrentaron a ellos y les llamaron la atención por lo que estaban haciendo se enfadaron tanto que optaron por tirar todo a la playa.