Los recuentos de células tóxicas muestran que el nivel de toxicidad empieza a reducirse. Ante esta progresiva disminución de las biotoxinas marinas, ayer se autorizó la reapertura de cuatro polígonos bateeiros, tres de ellos situados en la ría de Vigo y uno correspondiente a la de Arousa.
Se trata, en concreto, de los polígonos Redondela B-G, Redondela C-F, Redondela D y Cambados A2. Además de haberse constatado la eliminación de la popularmente conocida como marea roja en dichos polígonos, hay otros donde los análisis efectuados por el Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar) se han saldado ya con el primer negativo, lo cual significa que se está a la espera de otra prueba para confirmar la mejoría y abrir más bateas de dichas rías.
El cambio de las condiciones meteorológicas, pero sobre todo las variaciones en el régimen de vientos experimentadas en días pasados han sido determinantes para hacer que el episodio tóxico que comenzaba hace prácticamente un mes empiece a remitir.
Aún quedan muchas bateas de mejillón cerradas, pero todo indica que irán abriéndose escalonadamente, a lo largo de los próximos días. Hay que recordar que permanecían abiertos en toda Galicia dos polígonos bateeiros, ambos en la ría de Ares-Betanzos. Así pues, tras abrirse los cuatro de ayer todavía quedan 44 polígonos sin actividad extractiva.
