Después de dos años de caída en los registros de donaciones de sangre en Vilagarcía, parece que la solidaridad ha repuntado en la capital arousana al lograr que el 2012 terminase con un total de 1.673 extracciones contabilizadas por el Centro de Transfusión de Galicia (CTG), lo que se traduce en un 13% más que el ejercicio anterior, cuando las cifras no alcanzaban los niveles recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS)-

La autoridad sanitaria aconseja un índice de entre 40 y 60 donaciones por cada mil ciudadanos para cubrir las necesidades de sangre de una comunidad. Pues bien, en 2011 la ciudad registró una tasa de 39 por 1.000, mientras que el último informe (de 2012) pone de manifiesto que 44 de cada mil vilagarcianos ya donan sangre.

Aunque a priori parezca un incremento muy suave -de 1.481 a 1.673 donaciones-, hay que tener en cuenta que las grandes empresas constituyen una de las ubicaciones en las que paran los autobuses del Centro de Transfusión y que debido a la crisis muchas han cerrado o bien han reducido sus plantillas, lo que perjudicaría a los niveles de extracciones de sangre. Por ello hay que darle mayor valor a ese 13% de aumento.

A Illa, ejemplo a seguir

En cuanto a los demás ayuntamientos de O Salnés, A Illa de Arousa es el segundo concello de Galicia con una mayor proporción de extracciones: 93 por cada mil habitantes frente al 89/1.000 del año 2011. La solidaridad creció un 4%. Al municipio isleño solo le supera en la comunidad autónoma Santiago, con 106/1.000.

Todos los municipios salinienses elevaron sus donaciones salvo Ribadumia y Vilanova, que los redujeron un 1%, pasando de 206 a 204 y de 319 a 316 respectivamente. En cualquier caso, se trata de disminuciones residuales, prácticamente inexistentes.

El ayuntamiento que más mejoró fue Meis al incrementar las extracciones de sangre un 33% en solo un ejercicio: de 67 a 89. Con todo, su tasa es la más baja de la comarca (18 donaciones por cada mil habitantes) y ni de lejos se aproxima a los niveles que recomienda la OMS de 40/1.000.

Hay que destacar el importante aumento que experimentó Cambados, que se sitúa como el segundo municipio de la comarca con una mayor tasa después de A Illa. Un total de 897 cambadeses se animaron el año pasado a donar sangre, lo que significa una crecimiento del 21% y una tasa de 65/1.000.

La donación de sangre es un acto voluntario, universal, anónimo, altruista y gratuito, y con él pueden salvarse muchas vidas. En Galicia se precisan en torno a medio millar de extracciones diarias -de todos los grupos sanguíneos- para garantizar un correcto abastecimiento. Desde el Centro de Transfusión de Galicia insisten en que la sangre extraída a cada donante -unos 450 mililitros- se recupera "casi de inmediato" tras tomar un refresco y algún alimento.