El sector bateeiro gallego desarrolla la que, para muchos productores, es la peor campaña de extracción de mejilla de toda su historia. Aseguran que la semilla del mejillón es más escasa que nunca y temen que esto represente "la ruina absoluta" para muchos de ellos, ya que recolectar la cría del molusco para encordarla -sujetarla a la cuerdas de la batea para que engorde hasta alcanzar el tamaño comercial- es el paso previo indispensable para garantizar el cultivo.

Básicamente puede decirse que sin mejilla no hay posibilidad alguna de conseguir al cabo de diez o doce meses el mejillón con el que abastecer a los clientes y mercados.

Los diferentes mejilloneros consultados ayer coinciden al señalar que, por causas que desconocen, la mejilla "no se ha fijado a las rocas del litoral", por eso exigen a la Consellería do Medio Rural e do Mar que encargue urgentemente estudios minuciosos "para determinar por qué está sucediendo esto", al tiempo que le reclaman que amplíe el plazo para poder recolectar la cría necesaria.

Teóricamente la campaña de la mejilla finaliza a finales de abril, pero lo habitual es que se prolongue al menos un mes más, para dar tiempo a los bateeiros a recoger el producto y afrontar el proceso de encordado.

Pero cada vez son más los bateeiros que consideran que la mejilla no debe estar sometida a ningún tipo de veda o época probable de extracción, sino que insisten -lo hacen desde hace años, y ahora con más fuerza si cabe- en que debe permitirse recolectarla en cualquier época del año.

Además, dado que este invierno "ha sido duro, con lluvias y temporales constantes, no hemos podido salir en busca de mejilla con la frecuencia que hubiésemos querido, por eso ahora hay gente muy preocupada, pues temen que la Xunta cierre la campaña sin que tengan tiempo para lograr toda la semilla que necesitan".

De ahí que los mismos bateeiros que reivindican estudios y una ampliación del plazo insten a la Administración a pronunciarse "cuanto antes, para que así la gente pueda estar más tranquila y organizar mejor y con calma el calendario de trabajo y recolección".

Si no se hace así, es decir, si no se amplía el plazo o no se anuncia ya esta posibilidad, "la gente va a seguir presionada para conseguir la mejilla en tiempo y forma, y esto supone que en muchos casos nos juguemos la vida, pues si las fechas aprietan hay que saltar a las rocas aunque tengamos fuerte temporal", declaran.

FARO DE VIGO acompañó ayer a varios mejilloneros arousanos que se desplazaron hasta la isla de Sálvora para recolectar mejilla. También ellos confirmaron que este año "hay escasez" y que "los temporales de invierno causaron numerosos problemas y nos impidieron trabajar en buenas condiciones".

Mientras saltaban de roca en roca y utilizaban la "raspeta" para sacar la cría del mejillón pegada a las piedras -aunque la mejilla no se cotiza comparte el mismo y peligroso espacio que los populares y caros percebes-, los recolectores explicaban que este trabajo entraña un riesgo considerable. Pero eso parece importarles poco. Lo que más les preocupa es que no resulta nada sencillo acumular toda la producción de mejilla que precisa una batea para garantizar la cosecha del año siguiente.

Una vez más, la clave, o la preocupación del sector, es que sin semilla no hay fruto que recoger.

Mientras estos bateeiros de A Illa de Arousa trataban de aprovechar al máximo la ausencia de vientos y de oleaje, otros, desde el mismo puerto y demás puntos de la ría, abundaban en el problema denunciado.

"Hace días se celebró una reunión sectorial y ya se alertó de esta situación, explicándose a la Xunta que se trata de un hecho gravísimo, sin precedentes", argumenta el presidente de una de las agrupaciones mejilloneras gallegas. El que habla es Javier Blanco, máximo responsable de la asociación Virxe do Rosario, en Vilaxoán (Vilagarcía), que una vez más es de los pocos dirigentes del sector que no tienen reparos en pronunciarse con nombres y apellidos.

"No tenemos nada que ocultar; lo que tenemos es un gran problema que la Administración debe corregir ya, antes de que tengamos una desgracia que lamentar porque un bateeiro, agobiado por falta de tiempo, arriesga su vida para recoger mejilla", espeta Blanco.

El propio presidente de Virxe do Rosario confirma que su asociación y organizaciones como Rianosa, Aimex, Cambados y Rianxeira ya remitieron un escrito al secretario xeral do Mar, Juan Carlos Maneiro Cadillo, para pedirle una ampliación del plazo de recolección y estudios "serios" sobre la "desaparición" de la cría.

Abundando en lo anteriormente expuesto, Javier Blanco reflexiona en voz alta para indicar que "a estas alturas de campaña la mayoría de las bateas ya tendrían que haber recogido toda la mejilla necesaria, o al menos la mayor parte, pero sin embargo ocurre todo lo contrario, ya que casi nadie tiene cría para encordar porque no la hay".

También él coincide en que "los temporales de invierno no permitieron recogerla, y cuando sí pudimos peinar el litoral nos encontramos con la desagradable sorpresa de que no aparece".

Cree que "ocurre exactamente lo mismo que con el percebe, que también ha desaparecido en muchos sitios de la costa gallega porque no tiene fijación", de ahí que apoye la petición de estudios científicos que busquen explicaciones a todo esto.

El bateeiro vilaxoanés aprovecha -y esta es una vieja lucha de Javier Blanco- para demandar que la mejilla pueda recogerse en cualquier época del año, "ya que de este modo también se escalona la producción". Y termina diciendo que "hay piedras en Baiona que están totalmente blancas, por eso la Xunta debe dejar abierta la campaña hasta que logremos toda la cría que necesita nuestro sector".

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