Terminada la campaña de control de velocidad que llevó a cabo Tráfico en Vilagarcía durante los últimos diez días, se ha visto que las infracciones más graves se cometieron en la avenida Agustín Romero, que es la que comunica el centro de la ciudad con Cornazo, y que pasa por delante de la escuela de idiomas o la sede de Protección Civil.

La velocidad en esa vía está limitada a 50 kilómetros por hora, pero el vehículo-radar de la Dirección General de Tráfico (DGT) detectó un automóvil a 92 kilómetros por hora -prácticamente el doble del máximo permitido-, y otro a 86 kilómetros por hora.

Los problemas por exceso de velocidad en Agustín Romero no son nuevos. De hecho, los vecinos llevan tiempo reclamando medidas que mejoren la seguridad vial en esa zona, y el Ayuntamiento encargó a la Policía Local un informe sobre el asunto. En un pleno reciente el grupo municipal del BNG presentó una moción instando a Ravella a mejorar la seguridad en la avenida, aunque finalmente se retiró del debate a expensas de las conclusiones del informe policial.

Sea como fuere, en la zona se han tomado algunas medidas, como la creación de un paso de peatones elevado en el cruce con la calle de salida desde el campo de fútbol de A Lomba, o la colocación de unos semáforos de precaución a la altura de la intersección de salida desde el barrio de As Bocas. En ese caso la señal luminosa está siempre en ámbar, y para salir desde As Bocas los vehículos cuentan con un espejo convexo.

Sin embargo, y pese a que las velocidades máximas se han detectado en Agustín Romero, la calle donde el radar de la DGT ha registrado un mayor número de infracciones fue Valentín Viqueira, en Carril, donde se tramitaron 39 denuncias contra conductores que iban a más de 70 kilómetros por hora, a pesar de que la calle está limitada a 50, que es el máximo habitual en los cascos urbanos.

Desde el 22 de febrero

La DGT realiza periódicamente campañas de control de velocidad en los ayuntamientos. En el caso de Vilagarcía ésta se desarrolló entre el 22 de febrero y el 3 de marzo, y llevaba por título "A velocidade prexudica seriamente a túa saúde". En total se midió la velocidad de 10.350 vehículos, y se tramitaron 81 denuncias, lo que significa el 0,78 por ciento del total.

Aunque el vehículo era de la DGT, los controles fueron realizados por agentes de la Policía Local de Vilagarcía, y se centraron en cuatro de los principales accesos a la localidad, como son la carretera nacional 640, en Rubiáns; la calle Valentín Viqueira, en la PO-548; Agustín Romero (PO-301); y la avenida de Vilanova, en la PO-549. Estos son, además, los lugares donde más accidentes de tráfico se producen en el casco urbano.

Se hicieron un total de 17 controles, lo que equivale a prácticamente dos diarios, y solo se cursó denuncia en el caso de los vehículos que iban a más de 70 kilómetros por hora en vías limitadas a 50. Desde el Ayuntamiento de Vilagarcía apuntan que el objetivo de la campaña era contribuir a una mayor concienciación de los conductores sobre los peligros que acarrea el exceso de velocidad.

Y es que según las estadísticas de la Dirección General de Tráfico, si todos los conductores circulasen a una velocidad adecuada se reducirían en un tercio las víctimas mortales en las carreteras. La DGT estima que el 27 por ciento de los accidentes con muertos que se producen en las vías interurbanas tienen algún tipo de relación con un exceso de velocidad, y que con solo reducir un cinco por ciento de media la velocidad a la que se circula se podrían bajar en un 20 por ciento el número de siniestros con fallecidos.