La propuesta del gobierno de Vilagarcía sobre la creación de brigadas de tarde con empleados de determinados servicios municipales ha generado un importante revuelo entre los trabajadores de Ravella. Los sindicatos analizaron ayer de forma individual el documento entregado por el alcalde sobre la reorganización de servicios, y la primera impresión no ha sido para nada satisfactoria. Sus servicios jurídicos incluso dudan de la legalidad de algunos aspectos, como el cumplimiento de los descansos. "No hay por donde cogerlo", valoran.

La plantilla no se opone a que se instauren turnos de tarde en jornada ordinaria -sin cobrar horas extra-, sino que cuestiona la forma en la que está redactada la propuesta, que se reduce a un único folio. Los sindicatos la califican de "ambigua y escueta", aparte de echar en falta datos "esenciales" como por ejemplo el número de personas que formarán cada brigada y los departamentos afectados por la reorganización, que, aunque el regidor les informó de ello verbalmente, en el documento solo se hace referencia explícitamente a Parques y Jardines, Medio Ambiente, Auditorio y electricistas.

Una de las novedades que ofrece el documento es que los operarios que formen parte de las brigadas municipales podrán desempeñar "cualquier otro puesto dentro del mismo grupo de clasificación", es decir, que "un electricista podrá desbrozar la maleza de los caminos del rural o montar palcos", ejemplifican fuentes sindicales de la mesa de negociación.

Descansos

El Concello plantea una brigada de lunes a viernes en horario de 15,00 a 22,30 horas. Como encargado de la brigada, se desprende de la propuesta que ocho encargados se rotarán para ponerse al frente de este equipo de tarde. "Por ejemplo, si esa semana trabaja de tarde el responsable de electricidad, ¿por la mañana los electricistas no van a tener jefe?", se preguntan desde la junta de personal.

En cuanto al cumplimiento de los descansos, la propuesta dice literalmente que "el personal adscrito esa semana a la brigada de tarde atenderá aquellas cuestiones que sea necesario solventar en sábado y domingo, compensando en tiempo de descanso las horas dedicadas como horas dobles en la semana siguiente". Mientras que los sindicatos entienden que de esta forma no se cumplirían los descansos, Ravella afirma que se respetarán "los descansos mínimos semanales y diarios legalmente previstos, y la jornada máxima semanal de 37,5 horas".

En lo que se refiere concretamente a los operarios de Parques y Jardines y de Medio Ambiente, el gobierno vilagarciano anuncia en su propuesta que asumirán la limpieza del "botellón" y de los aseos de las playas de A Concha-Compostela y de Bamio. Estas tareas tendrán carácter rotativo y se efectuarán durante los fines de semana.

De eliminar los restos del "botellón" se encargarán dos empleados por turno los domingos de 8,00 a 12,00 horas, mientras que los WC de las playas se limpiarán sábados y domingos de 8,00 a 10,00 horas, con un trabajador por turno. Este personal verá compensado su trabajo en fin de semana con horas dobles la siguiente semana.

Los representantes sindicales de la plantilla municipal no comprenden por qué los operarios de Parques y Jardines y Medio Ambiente tienen que realizar labores de limpieza cuando el Concello paga a dos empresas -mediante concesión- por la limpieza del municipio: a Clece por encargase de las instalaciones municipales y a Cespa por las calles y la recogida de basura. "Tenemos muchas dudas sobre la propuesta para las brigadas", insisten desde los sindicatos.

Por último, en lo que atañe a los trabajadores del Auditorio municipal, queda claro en el documento que los dos conserjes cubrirán todo el día: uno en horario de 8,00 a 15,00 horas y otro de 15,00 a 22,00 horas de lunes a viernes. La persona de mantenimiento tendrá un horario de 8,00 a 15,00 horas de lunes a viernes y cubrirá trabajos en fin de semana. "Suplirá a los conserjes cuando el servicio lo requiera", reza el texto. Los porteros entran en turnos de guardia los sábados por la mañana. Lo que no queda suficientemente claro es el papel de los electricistas, que rotarán para estar los sábados en el Auditorio.