Medio año sin accidentes en las carreteras de O Salnés es para que se celebre, sobre todo cuando hubo ejercicios en el que el número de víctimas mortales se contaba por meses, por no decir cada semana.

La red comarcal registró el último siniestro mortal el pasado 28 de septiembre de 2012 en Baión cuando un coche a cuyo volante iba una persona ebria, según Tráfico, arrolló a un motorosta que regresaba a su casa después de terminar su turno de noche en una fábrica de envases de aluminio de A Goulla.

A partir de ahí solo hubo algún siniestro con heridos de más o menos consideración o de mayor o menor espectacularidad. De hecho, como subrayó la Diputación, ni siquiera hay constancia de accidentes graves en la que se consideraba un punto negro de la red, entre Catoira y Carracedo.

Los otros siniestros mortales importantes recientes fueron un atropello en Vilagarcía ocurrido el pasado 14 de septiembre y la colisión en la que falleció una grovense el 14 de julio.

Los siniestros recientes más importantes se registraron en Covas de Lobos, el pasado 6 de febrero, al estar implicado un motorista; y la colisión por alcance en O Sixto, aunque solo se registraron dos heridos leves, según el diagnóstico inicial.

A finales del pasado año también destacó un atropello en Vilanova con una mujer grave. Días antes también sufrió heridas de escasa consideración otra mujer que se estrelló tras dar un volantazo para esquivar a un gato.

Espectacular fue también un accidente de tráfico en O Esteiro ocurrido el pasado 25 de octubre pues un vehículo tiró un poste telefónico, aunque los ocupantes salieron ilesos.

Los datos son muy positivos en el sentido de que hace no muchos años, el número de siniestros que se registraba en la comarca alcanzaba índices dramáticos.

Las claves para la reducción pueden estar en la mayor seguridad de las carreteras y autovía, la mayor presencia de radares de velocidad en las vías principales y secundarias, pero también a la reducción del número de vehículos en las carreteras a causa de la crisis o la concienciación mayor de los conductores tanto en relación con la velocidad o la ingesta de alcohol.

Aunque se debe "tocar madera" en relación con este tipo de datos, solo el hecho de que en medio año no se haya registrado ni un solo muerto en la red viaria de O Salnés es una realidad que se ha tenido presente en las últimas juntas de seguridad.