La variante del Camino Portugués que atraviesa la comarca de O Salnés contará con señalización a partir de la próxima semana. Los responsables de la Mancomunidade aseguran que en los propios talleres de la institución ya se han fabricado más de 60 postes de madera indicativos, que se colocarán en las intersecciones en las que puedan surgir dudas a los peregrinos. Ayer se instaló en Armenteira la primera señal, que incluye la flecha de color amarillo porque la ruta está aprobada por la Oficina del Peregrino. Próximamente, esta señalización se completará con hitos (postes de piedra).

Aunque todavía no están instalados todos los indicativos, este trazado de 43 kilómetros entre Pontevedra y Vilanova (20 km en la primera etapa y 23 en la segunda) ya ha sido estrenado por algún que otro peregrino. No obstante, también surgieron algunas quejas por la ausencia de señales para poder orientarse.

El presidente de la Asociación de Amigos del Camino Portugués, Tino Lores, destacó que a esta "variante espiritual" del itinerario luso –el segundo con una mayor afluencia, después del francés– se une a continuación la ruta marítima, entre el municipio valleinclaniano y Pontecesures. De ahí a Santiago los caminantes pueden seguir por tierra a lo largo de 24 kilómetros. "El Camino lleva a los peregrinos directamente a la playa. Pueden bañarse en O Terrón y luego continuar por barco o por tierra", dijo Lores, que presentó en Brasil un vídeo de la ruta xacobea que recorre O Salnés.

Las campañas de promoción del Camino Portugués se basan en captar peregrinos procedentes de Brasil, Alemania y Japón –en este último caso por el elevado nivel adquisitivo de los nipones–. Lores precisó que cada peregrino deja una media de 30 euros diarios y rechazó que se trate de "un turismo de alpargata". "No es de cinco estrellas, pero deja dinero, que no es nada despreciable en estos momentos de crisis económica", agregó el presidente de Amigos de la Asociación de Amigos del Camino Portugués.

El presidente de la Mancomunidade, Gonzalo Durán, aclaró que las señales se colocarán entre Armenteira y Vilanova. No obstante, anunció que se pondrá en contacto con los alcaldes de Pontevedra y Poio, de los que espera colaboración, para completar la señalización en todo el trazado.

El máximo responsable de la Mancomunidade hizo hincapié en el amplio atractivo turístico del que goza la comarca. "O Salnés es algo más que playas y puede tener otro tipo de turismo", afirmó Durán.

En este sentido, el alcalde de Meis, José Luis Pérez, consideró que el nuevo trazado "pondrá en valor la comarca y promoverá el turismo rural y de interior". El regidor alabó la elección de presentar la señalización en un "enclave tan privilegiado" como el monasterio de Armenteira.

Alojamientos en Armenteira y O Terrón

Los peregrinos que elijan la variante de Pontevedra a Vilanova en su camino hacia Compostela tendrán dos opciones de alojamiento: en el monasterio de Armenteira o en el Camping Arco Iris de la playa de O Terrón. Aunque ninguno de los dos está calificado como albergue para peregrinos, el monasterio de Meis actúa como hospedería, según indicó el presidente de la Asociación de Amigos del Camino Portugués.

Tino Lores manifestó que su objetivo es que en el próximo Año Santo, en 2021, la ruta lusa alcance entre 80.000 y 100.000 peregrinos. Para ello, "hay que ofrecer alternativas y diversificar" a los caminantes para que el trazado no acabe masificado, como es el caso del Camino Francés, dijo. "El Portugués empezó con cuatro peregrinos en 1993 y en el Año Xacobeo llegamos a 32.000 personas", destacó el portavoz del colectivo.

Por su parte, el gerente de la Mancomunidade do Salnés, José Ramón Guinarte, anunció que la entidad comarcal está trabajando en un sistema informático para facilitar a los recepcionistas de los hoteles la orientación de los peregrinos. Otra de las ideas que plantea la Mancomunidade es que los hoteles vayan a buscar a los peregrinos al monasterio de Armenteira para realizar un recorrido turístico por la comarca.