Unas doscientas empresas con las que el Ayuntamiento de Vilagarcía acumulaba impagos desde hace dos años han cobrado en los últimos días un total de 4.464.719,53 euros. Los proveedores municipales, en gran parte firmas familiares o de mediano tamaño, han recibido esta semana los pagos incluidos en el plan aprobado por el gobierno central para poner al día las cuentas de los municipios. La inyección ha sido recibida como "una auténtica lotería" que a más de uno ayudará a poner al día sus cuentas y a respirar con un poco más de tranquilidad en el actual contexto de crisis.

Ayer expiró el plazo previsto para que la entidad Bankia hiciese llegar a los acreedores que prestan servicios o suministros al Ayuntamiento de Vilagarcía el pago acumulado por los mismos. Y la previsión se cumplió, pues más de un empresario arousano amanecía este viernes con la sorpresa de un ingreso en su cuenta bancaria del que muchos querían disponer.

El montante de la deuda acumulada es heterogéneo, y varía en función de la empresa y el tipo de servicio prestado. Sin embargo, en todos los casos la inyección económica lo ha sido también de optimismo.

"En mi caso no era demasiado dinero el que me debían, pero la verdad es que en estos momentos, tal y como están las cosas, viene genial", asevera el hostelero Marcos Ramos, que ayer cobró el importe correspondiente a tres cursos de cocina impartidos en diciembre a las asociaciones de mujeres de Bamio, Rubiáns y Guillán.

La satisfacción y la alegría eran ayer los sentimientos predominantes en un buen número de empresas de Vilagarcía. Y es que en muchos casos la relación con el Ayuntamiento se remonta tiempo atrás. Y aunque el abono de los pagos pueda ser irregular, tal y como están las cosas nadie se plantea dejar de proveer a Ravella.

"Nosotros llevamos varios años trabajando con el Ayuntamiento, y seguiremos haciéndolo", explica el administrador de una firma de equipamientos de obra, Ángel Martínez, que reconoce que la tramitación de los cobros es a día de hoy "complicada" con una buena parte de su cartera de clientes. Y es que, si la situación es complicada para la mayoría de las empresas, para las relacionadas con el sector de la construcción, actualmente paralizado casi al 100%, lo es todavía más.

La celeridad con que gobierno central y administraciones locales han tramitado el crédito ICO para saldar la deuda con proveedores acumulada hasta el pasado fin de año ha sido muy celebrada por las empresas vilagarcianas. "La verdad es que estamos muy contentos", reconocían ayer responsables de diversas firmas, como la ferretería Sobrino.

El Ayuntamiento no es el único cliente que de un tiempo a esta parte se retrasa en los pagos. De hecho, más de un empresario aprovechará esta inyección económica para tratar de cobrar de otros clientes que también estaban incluidos en el plan de pago a proveedores municipales.

Con el volumen de ventas y/o actividad muy reducido a causa de la crisis, llegar a fin de mes es complicado para muchas firmas. De hecho, las entidades bancarias han cortado las líneas de financiación a muchas empresas del entorno arousano, que atraviesan momentos difíciles. No es el caso de la firma maderera que dirige Jorge Redondo, que de cualquier modo reconoce que el ingreso recibido supone un alivio importante.

En el listado de acreedores incluido en este plan figuran firmas con situaciones dispares. En alguno de los casos, la deuda acumulada se traducía en hasta doscientas facturas por pequeños y continuados suministros de materiales para distintas obras y reparaciones.

El Ayuntamiento de Vilagarcía, al igual que todos los que se han acogido a esta línea de crédito, ha puesto al día sus cuentas y ha saldado las deudas que mantenía hasta el año pasado. Sin embargo, hay que recordar que la maquinaria municipal requiere de suministros continuos para garantizar el mantenimiento de parques, jardines y espacios públicos, el correcto funcionamiento del saneamiento, o la limpieza y el suministro de servicios básicos como el teléfono o la electricidad en las instalaciones municipales. Es por eso, que en lo que va de este 2012 la deuda ha continuado incrementándose, y ayer varios empresarios recordaban que "ahora quedan pendientes los cobros de los últimos meses".

Los casi 4,5 millones de euros que ahora el Estado abona a los proveedores municipales deberán ser devueltos por el Ayuntamiento durante los próximos diez años. Además, a esa cifra habrá que sumar un interés fijo del 5,25% al que habrá que añadir las actualizaciones trimestrales del euríbor.

Aunque los grupos de la oposición en todo momento se han mostrado a favor de priorizar a los pequeños y medianos empresarios y de saldar la deuda con ellos, las condiciones del crédito no son bien vistas por PSOE, BNG y Esquerda Unida. Esas formaciones ven excesivo el tipo de interés impuesto, que creen podría hipotecar el futuro del consistorio y limitar considerablemente su capacidad de inversión durante la próxima década.

Ravella tiene 1,4 millones pendientes de reconocer

Las principales deudas que arrastra el Ayuntamiento de Vilagarcía han sido saldadas en menos de un año gracias a las dos operaciones de préstamo extraordinarias fomentadas desde el Estado, y que permitieron liquidar 5.721.574,78 euros en facturas de proveedores. Sin embargo la deuda municipal heredada aún se mantiene y actualmente está cifrada en algo más de 1,4 millones de euros.

La empresa Sogama, responsable del tratamiento de residuos de Vilagarcía y del resto de Galicia, es a día de hoy el principal acreedor de Ravella. Las facturas que deberían abonarse a esta firma se acumulan mes a mes en el consistorio, que no ha podido saldar la deuda con esta firma debido a que las empresas de participación pública (y Sogama lo es) no podían acogerse a los créditos ICO ofertados por el gobierno central. Es por eso que el gobierno vilagarciano valora la opción de diseñar un programa de periodificación de pagos que permita ir saldando esta deuda poco a poco. La delicada situación económica que atraviesan las arcas municipales ha motivado la elaboración de un plan de ajuste municipal, que podría peligrar si finalmente el Ministerio obliga al Ayuntamiento a devolver los fondos sin invertir de Luz Salgada y sus intereses. Los servicios jurídicos municipales elaboran, con el apoyo de la Xunta, un requerimiento para que el gobierno central apruebe la prórroga y el cambio de finalidad de partidas incluidas en ese programa. El objetivo es conseguir que los 2,5 millones del aparcamiento subterráneo que no se construirá puedan destinarse a otras obras.