La parroquia de Baión (Vilanova de Arousa) celebra este domingo una fiesta por el reciente término de las obras de restauración que se han llevado a cabo en la iglesia. Unos trabajos que según el sacerdote, Enrique Porto Rey, han permitido renovar completamente la cubierta y recuperar el retablo, una composición barroca en la que figuran las imágenes de San Juan, San Sebastián, San José, San Antonio y la Virgen de los Dolores.

Los actos festivos comienzan con una misa a las 12 del mediodía, a la que está previsto que asistan el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, y el presidente de la Diputación, Rafael Louzán. A su término sale la procesión, con las imágenes restauradas y la música de los gaiteros de Godos. Posteriormente, tiene lugar una comida con 150 personas en el pabellón de deportes.

La restauración ha sido posible gracias a las donaciones económicas de los vecinos y al respaldo de instituciones como el ayuntamiento de Vilanova o la Diputación. Enrique Porto afirma que la iglesia estaba prácticamente en ruinas en 1954, cuando llegó a la parroquia el sacerdote Francisco López. La situación era tan mala que incluso llovía dentro del templo. El cura se puso manos a la obra y realizó las primeras obras, restaurando el tejado e incorporando a la fábrica del templo una capilla con piedra procedente, al parecer, del pazo de Baión. Enrique Porto continuó con los trabajos en 1982, que es la fecha en que llega a la parroquia vilanovesa.

Las cerchas prefabricadas de la cubierta se recubrieron de madera y se mejoró el aislamiento de la teja, al tiempo que se rehabilitaron el retablo y las imágenes de los santos. Las obras finalizaron hace poco más de un mes y ahora los vecinos quieren celebrar con una misa y una comida "el ramo" de estos trabajos.

Los tesoros

La iglesia empezó a construirse entre los siglos IX y XI. Enrique Porto sostiene que sus dos principales tesoros son una imagen del sagrario y una puerta que comunica la sacristía con el presbiterio. En el caso del sagrario se trata de una talla dorada adquirida a principios de la década pasada en un taller de arte sacro de Madrid. En lo que respecta a la puerta, la grabó el artesano compostelano Leopoldo Rodríguez, y representa la escena del bautismo de Jesús en el Jordán a manos de San Juan –patrono de Baión–, tal y como la concibió El Greco.

La parte más antigua del templo es el presbiterio –de probable origen prerrománico–, y el cura declara que quería recuperar su piso de piedra, si bien los vecinos prefieron al parecer que continuase siendo de plaqueta.