Los dirigentes de las asociaciones de vecinos de A Torre y Trabanca Badiña han vuelto a encender la señal de alarma en relación con el asentamiento gitano de Berdón que, lejos de estar controlado, continúa creciendo. Estas asociaciones instan al Concello de Vilagarcía a tomar medidas contra las edificaciones ilegales que se levantan en la zona, y a acabar con los problemas de higiene derivados de los desperdicios que generan las personas que se dedican a la chatarra.

Una de las cuestiones más peligrosas que denuncian en materia de higiene es el desguace de coches y motores en las inmediaciones de la depuradora municipal de agua potable, que está situada en Trabanca Badiña y actualmente prácticamente rodeada de las chabolas y caravanas del asentamiento gitano, que sigue creciendo.

Los directivos vecinales puntualizan que llevan años de reivindicaciones ante el Concello de Vilagarcía por el problema del asentamiento gitano y confiesan que, con poco éxito. Pero piden a las autoridades que exijan a los propietarios de los terrenos las mismas condiciones que al resto de la ciudadanía, independientemente de que sean payos o gitanos. Entienden que con este último colectivo se está haciendo una discriminación positiva ya que a esta gente se le permite el incumplimiento de la legislación urbanística vigente.

El presidente de la asociación de vecinos de A Torre, Juan Davila, recuerda que prácticamente frente al portalón del campo municipal de fútbol de Berdón se inició una edificación ilegal por parte de una familia gitana y que, pese a las denuncias cursadas por la asociación de vecinos, continuó la construcción de la casa.

"Ahora además hay un cierre con una caravana y hasta han puesto un letrero de prohibido aparcar para que la gente no ponga sus coches delante cuando hay partido de fútbol. Nada de esto es legal pero el Concello no toma medidas. Hemos solicitado una entrevista con el alcalde para abordar este problema, entre otras cuestiones vecinales. Pero nos dijeron que teníamos que esperar porque el concejal del Rural, Antonio Carballo, está coordinando una agenda de entrevistas del gobierno municipal con las asociaciones de vecinos", declaró Juan Davila, presidente de la asociación de A Torre.

"Va pasando una corporación y otra y el tema de los gitanos no se soluciona. En la zona de Berdón y de Trabanca compran trozos de monte, que es terreno no urbanizable y se hacen una casa. Y encima el Ayuntamiento les da ayudas. Pero el mayor problema es el de la higiene. Alrededor de las casas ilegales reúnen una enorme cantidad de chatarra. Algunos no deben tener ni baño. El Concello debería tomar medidas. Antes la gente de A Torre iba a pasear por Berdón pero ahora es difícil porque la zona se ha convertido en un estercolero, con mayúsculas", dice Davila.

El presidente de los vecinos de A Torre insta al gobierno municipal a hacer un control sobre el asentamiento, ya que se ha detectado un incremento de la población de la zona. "Creemos que está viniendo gente de otros lados porque saben que aquí nadie les dice nada y pueden hacer lo que quieran", declara el directivo vecinal.

En la misma postura está el presidente de los vecinos de Trabanca Sardiñeira, Faustino Laya, quien reconoce que el problema viene de hace tiempo y que ninguna de las sucesivas corporaciones municipales ha tomado cartas en el asunto para solucionarlo.

"Posiblemente se solucione si a estos terrenos se le da calificación urbanística. Así la gente de Trabanca podría construir y no vender los terrenos no urbanizables a los gitanos, que son los únicos que atreven a hacer construcciones ilegales. Aunque ahora también hay alguna edificación entre ellos, incluso con piscina", manifestó Laya.

El directivo de Trabanca Badiña pide que se le aplique a todos los propietarios la misma normativa urbanística y que se haga cumplir.

En cuanto a la falta de higiene, critica que se les permita convertir el monte de Trabanca Badiña en un vertedero incontrolado, con todo tipo de desperdicios y chatarra.