La población extranjera en el municipio de Cambados experimentó un ligero ascenso durante el último año, al pasar de 796 personas empadronadas a 844. Hace una década, los extranjeros significan apenas el 1 por ciento del censo municipal, pero en la actualidad ya son el 5,09 por ciento del total.

El departamento de Estadística del ayuntamiento considera que las causas del ascenso son diversas. Los primeros en llegar fueron magrebíes y subsaharianos dedicados a la venta ambulante en los mercadillos. Posteriormente, llegaron extranjeros casados con españoles, que se asentaron en Cambados por uno u otro motivo.

A principios del presente siglo, coincidiendo con la bonanza económica y la necesidad de mano de obra para la construcción, muchos cambadeses emigran a otros puntos de España, con lo que las empresas locales se ven en la necesidad de buscar trabajadores con las vacantes dejadas por los gallegos.

Así es como llega una nueva oleada de inmigrantes, tanto para trabajar en la construcción como en la pesca. La mayoría fueron sudamericanos –sobre todo peruanos– y senegaleses, y se enrolaron fundamentalmente en los barcos del cerco. El asentamiento de estos extranjeros en el término municipal conllevó por una banda la necesidad de reagrupación familiar y, posteriormente, la obtención de la ciudadanía española. Eso motiva que en algunos casos ya no figuren en la estadística como extranjeros.

En el estudio que se había realizado en 2010 se detectó un incremento notable con respecto al año anterior (de 619 a 796, lo que significa 175 más), y por sexos había 444 hombres y 352 mujeres. En ese incremento sobresalía especialmente el colectivo peruano, que ascendió de 156 a 251 personas.

Los peruanos son los foráneos más numerosos en Cambados, con mucha diferencia sobre las demás nacionalidades, pero cuando llegaron los primeros marineros, en 2001, apenas eran una quincena de trabajadores. El año pasado la población peruana se redujo a 246 individuos, de los que 90 son mujeres. Tras ellos, los más numerosos son los marroquíes, que pasaron de ser 39 en 2009 y 70 en 2010 a 84 en el último ejercicio.

Hay también 64 ciudadanos portugueses (55 en 2009 y 60 en 2010); 63 colombianos (47 hace tres años y 60 hace dos); y 61 argentinos, que llegaron a ser 82 en 2009 –el segundo grupo más numeroso entonces– y 59 en 2010. Esto revela un descenso acusado de argentinos, un incremento fuerte de la población de Marruecos y que la colonia de Perú se mantiene estable.

Otras nacionalidades

El resto de grupos de población inmigrante mantiene cifras similares a las de 2010. Los europeos más numerosos, tras los portugueses, son los búlgaros, con 56 censados. En el municipio vecino de Ribadumia existe una colonia importante procedente de Bulgaria. También hay 21 rumanos, 17 italianos y 16 alemanes.

Por continentes, la mayoría de los inmigrantes son sudamericanos, ya que además de los peruanos, colombianos y argentinos están avecindados 26 uruguayos, 23 venezolanos y 44 brasileños, 17 más que en el censo anterior. "La integración de estos grupos siempre es más sencilla, por razones de historia y de costumbres", apunta el ayuntamiento, "aunque por el momento no se registran problemas de integración con ningún colectivo", puntualiza la misma fuente.