El año pasado se registraron cerca de 30.000 servicios ferroviarios en la estación de Pontecesures, cerca de 51.000 en la de Padrón y casi 18.000 en el apeadero de Catoira. Y estos datos, al parecer facilitados por las centrales sindicales y desmenuzados ahora por el concejal independiente Luis Sabariz Rolán, hablan claramente de un elevado uso de este servicio que, a juicio del propio edil, avala sin margen de duda posible la necesidad de preservar el tren de cercanías o proximidad.

Quiere defenderlo a toda costa, y reclama que se garantice la continuidad del servicio actual aún después de la implantación del Tren de Alta Velocidad (TAV).

Por eso insiste en que "entre el 1 de enero y el 30 de noviembre subieron al tren 12.980 viajeros y bajaron 13.700, lo que hace un total de 26.680 servicios".

A esa cantidad "debe añadirse un 10% correspondiente a bonos y otras incidencias, lo que nos sitúa en torno a 29.350 servicios en once meses".

Todo esto demuestra, considera el concejal pontecesureño, que "a pesar de que el servicio se ha ido debilitando, con la limitación del número de trenes que paran, la reducción de personal en las estaciones o los recortes del gasto de mantenimiento, el tren de cercanías sigue utilizándose, y de ningún modo la alta velocidad puede acarrear su eliminación".

Como miembro que es de la Comisión de Defensa del Tren de Cercanías Vilagarcía-Santiago, Sabariz termina defendiendo de nuevo "la potenciación de esta línea de cercanías" e incluso el establecimiento de más paradas, potenciando este trazado convencional "por razones económicas y ecológicas".