Los profesores de los centros escolares de educación primaria de O Salnés suprimen las actividades complementarias, como las clases de informática y medioambientales, en protesta ante la Administración. Así condenan que el Gobierno gallego reduzca el número de docentes en los colegios y por otro lado aumenten el horario de trabajo de los mismos.

Los alumnos de la comarca dejarán de recibir clases de informática o de medio ambiente entre otras materias. De esta manera, los profesores se niegan a realizar tareas que no están dentro de su calendario, incluidas actividades extraescolares, como por ejemplo excursiones de fin de curso u otras complementarias que supongan la preparación de antemano por parte de los profesores, tal y como informa el escrito enviado desde los colegios de A Lomba y el Arealonga.

Por esta razón los alumnos se quedarán sin salidas culturales o sin fiestas como el magosto, Os Maios o los tan divertidos carnavales. Todas las actividades que se realicen serán siempre dentro del recinto escolar.

Con esta drástica medida educadores de la comarca quieren mostrar su desacuerdo con la Administración y protestar contra medidas que creen no apuestan por la mejora de la calidad educativa si no por todo lo contrario y lo que buscan es reducir el gasto en educación. Francisco Abuín, director del colegio Anexo de Vilagarcía apunta que no sólo es por el aumento de horas lectivas si no que es por las condiciones en las que trabajan los docentes.

Duarte Correa, delegado sindical de la CIG-Ensino explicó "esta situación viene dada por el desprestigio que la Administración está haciendo contra el profesorado, tachándolos de vagos". El sindicalista añadió que, "esta decisión no tiene nada que ver con los sindicatos si no que son los propios profesores de los centros educativos los que la han tomado". A pesar de ello, comentó Duarte Correa que CIG- Ensino está totalmente de acuerdo con los docentes. "Los apoyamos, y entendemos que estén cansados de recibir diariamente críticas que no son fundamentadas".

Correa espera que está situación sea momentánea, es decir, "que los profesores no tengan que suprimir las actividades de forma definitiva si no que este tipo de decisión sirva para que la Administración autonómica entienda que deben sentarse a negociar y acaben entrando en razón". Recuerda que esta protesta perjudica al sistema educativo por lo que deben tenerla en cuenta. "Dejarán de hacerse actividades innovadoras, salidas y sólo se realizarán las tareas estipuladas", puntualizó el delegado sindical.

Una de las medidas comenzó ayer al negarse los profesores a participar en los ciclos de educación vial organizados por el Concello de Vilagarcía con motivo de la Semana Europea da Mobilidade.

Brazos caídos

Para la jornada de hoy desde los sindicatos se ha convocado un paro de "brazos caídos" durante media hora. Este paro está previsto que suceda entre las diez y las diez y media de la mañana.

Julio Ventín, director del colegio vilagarciano A Lomba, indicó ayer que "es complicado llevarlo a cabo ya que las clases estarán llenas de alumnos, pero en la medida de lo posible, todos los compañeros que quieran llevarlo a cabo, tienen derecho a hacerlo" aunque lo considera, "una medida muy poco efectiva".

Numerosas son las reuniones que en los últimos días se vienen celebrando en los colegios de toda la comarca para concretar la posición que va a tomar cada centro dentro de las protestas.

Además muchos de los colegios arousanos tienen programadas durante esta semana reuniones con los padres de los alumnos en las que se le explicará la postura de los docentes del colegio e intentarán que los padres apoyen la medidas que se llevarán a cabo.

Por otra parte los sindicatos han convocado dos huelgas este mes. Una de ellas será mañana y la otra está prevista para el día 27. "Creemos que serán muchos los docentes que se unirán a esta huelga" comentan desde el colegio de A Lomba.

Durante las jornadas de huelga funcionarán los servicios mínimos, es decir la directiva del centro debe estar en su lugar de trabajo para atender a los alumnos que vayan al colegio.

Julio Ventín comentó, "los servicios mínimos no pueden garantizar la seguridad de todos los alumnos por lo que a pesar de que no podemos decirles que no vengan a clase informaremos a sus padres de la situación".