Cristina Manso Novo ejerce la pediatría en O Salnés desde hace dos décadas. Natural de Lugo, en la actualidad trabaja en el centro de salud de Vilagarcía y recomienda a los padres con dudas sobre el conocido como Síndrome de Muerte Súbita del Lactante que las consulten con los profesionales o a través de los canales web de la Asociación Española de Pediatría.

-¿Qué es la muerte súbita del lactante?

-La definición del Síndrome de Muerte Súbita del Lactante es muy clara. Es el fallecimiento de un niño, inesperado por su historia clínica, y en el que los estudios de autopsia no revelan la causa que lo originó. Solo se puede hablar de muerte súbita después de realizar la autopsia y de ahondar en la historia clínica del niño.

-¿No se sabe entonces qué provoca la muerte súbita?

-Se han realizado investigaciones profundas sobre este tema durante al menos veinte años y no sacaron a la luz ninguna causa, así que ésta sigue siendo desconocida. De todos modos, los estudios sí que citan una serie de situaciones que parecen estar relacionadas con un mayor o menor riesgo y en las que podemos influir.

-¿Cuáles son esas situaciones?

-En primer lugar, la posición del niño al dormir. Parece ser que boca arriba disminuye mucho el riesgo, mientras que algunos estudios apuntan que al dormir boca abajo aumenta el riesgo de muerte súbita hasta en un catorce por ciento. Por eso se recomienda poner al niño inicialmente boca arriba, aunque eso no significa atarlo ni corregirle constantemente la posición que él adopte espontáneamente. En segundo lugar, se debe evitar que el niño quede cubierto con la ropa de cama o cualquier otro objeto, porque casi una cuarta parte de los niños que fallecen por el síndrome aparecieron con la cabeza cubierta por ropa de cama o la almohada. Para eso se recomienda que el bebé se coloque de tal modo que sus pies toquen siempre el límite de la cuna. En tercer lugar, es fundamental una atmósfera libre de tabaco, ya que puede multiplicar el riesgo por cuatro. Por ello no se debe fumar ni en casa ni en los ambientes en los que el bebé esté respirando habitualmente.

-¿Influye el tipo de alimentación del lactante?

-No hay ningún dato que demuestre que haya diferencias entre los niños de pecho y los de leche artificial. Lo que también hay que dejar claro es que no es algo contagioso, y que no hay signos de alarma que puedan llevar a predecir el síndrome.

-¿A cuántos niños afecta al año en España y hasta que edad existe riesgo?

-Se estima que a dos de cada 1.000 recién nacidos vivos. En cuanto al riesgo, por términos generales existe hasta el segundo año, que es el período del lactante, aunque el riesgo mayor se produce entre el primer mes y el primer año de vida.

-¿Pueden hacer algo las administraciones públicas para reducir el número de óbitos por Síndrome de Muerte Súbita?

-Primar la investigación médica es importante, ya que sus avances siempre van a ser de gran ayuda. Por otra parte, se ha asociado un ligero mayor riesgo con un nivel socioeconómico bajo o con el consumo materno de drogas. En ese sentido, toda la ayuda que presten las administraciones bienvenida sea. La educación de la población en general es bastante buena, y los servicios de enfermería y pediatría están para ayudar.