Hay historias que vale la pena contar. Esta es la de Nerea, una niña meañesa de 8 años que cursa estudios en el CEIP de As Covas y que padece desde los seis meses de vida una enfermedad tipificada como rara que le provocó una atrofia muscular y articular general que la tiene relegada a una silla de ruedas, traqueotomizada y dependiente de un respirador asistido.

La suya y la de sus padres es un reto por la vida, una historia de superación encomiable, secundada por un equipo de profesores entregados. Es así que el trabajo en pro de la formación de Nerea, su escolarización e integración, ha sido elegido por el jurado, entre cerca de 200 proyectos de toda España, como finalista de los Premios Nacionales para Dispacitados de la Fundación ONCE, premios que se fallan precisamente mañana jueves en Madrid, y donde estará, en representación del claustro de profesores del CEIP As Covas, su director Pedro Alberto Padín Solla.

La de Nerea es una historia de coraje impresionante, explica el director, pues mantiene emocionada a toda la comundad escolar gracias a unos padres admirables que son un ejemplo y que luchan por su hija como nadie, dicen.

Para los profesores de As Covas en Meaño, Nerea es un reto, en el sentido de como escolarizarla, como crear recursos didácticos adaptados para que progrese… y los logros son, de verdad, y gracias a su coraje y la dedicación de todos "emocionantes", explica el responsable del centro educativo meañés.

Nerea fue una niña normal hasta los seis meses en que sus padres se dieron cuenta de que algo empezaba a fallar.

Fue diagnosticada de una enfermedad rara que le causaba una atrofia generalizada.

Hoy Nerea apenas puede mover la cabeza lateralmente y, de forma espasmódica, también algo sus brazos. A los tres años entró como alumna de Infantil en el CEIP de As Covas, centro en el que ahora cursa segundo curso de Primaria y donde su educación e integración se ha convertido en un logro.

Hoy Nerea es capaz de leer y escribir, apunta Pedro Alberto Solla, que también resalta el hecho de que dibuja y puede marcar el ritmo musical. Pero lo hace gracias a un ordenador enganchado a su silla de ruedas, con teclados y programas adaptados, y que ella maneja con su cabeza o con los movimientos espasmódicos que realiza con sus brazos.

Fueron los propios profesores del centro los que dedicaron horas y horas a investigar, a ver y confeccionar programas adaptados a las necesidades de Nerea. Explica el director que todo el centro ha colaborado con mucho esfuerzo, probando aquí y allí, y recurriendo a la ayuda de técnicos cuando no encontraban otra salida salida.

Fue, mejor dicho está siendo, de un mérito enorme para todo un equipo que, de verdad, está disfrutando al ver los progresos de Nerea.

Pero, a la par, la niña se ha convertido en todo un ejemplo de integración, de forma que es hoy una alumna cien por ciento integrada, asegura Pedro Alberto.

De hecho acude a las fiestas de cumpleaños de sus compañeros y a otras citas para niños de su edad, acepta y es aceptada por todos, incluso cuando tiene mocos, al no poder sonarse, son sus propios compañeros quienes lo hacen. Es por tanto un ejemplo de integración y de compañerismo digno del máximo encomio y merecedor del premio nacional.

Presentar el trabajo que el colegio lleva a cabo con Nerea a los premios para discapacitados de la ONCE surgió casi por casualidad y a propuesta de su tutora en segundo, Roser Villar.

Cuando se lo comentaron a los profesores, estos decidieron presentarlo de inmediato y a última hora, según reconoce el director del centro educativo.

Y la misma sorpresa les produjo el hecho de haber sido designados finalistas. La dirección del centro meañés quiere hacer copartícipes del premio a los padres de la niña así como a los fisioterapeutas y médicos que trabajan con ella en el hospital de Santiago.

Si llega el premio buena parte del mérito es también de ellos, explica el director: O premio é o traballo dos meses, enfermeira, coidadora, orientadora, e en especial a súa titora", queire reflejar el director del centro educativo.

Otro de los objetivos que persigue el centro con esta candidatura es dar a conocer el fondo de armario que han creado y que puede servir a otros colegios para niños en situación similar. El propio centro lo aprovecha para educación infantil porque se adapta muy bien.

Pedro Alberto Padín Solla estará mañana en el Paseo de la Habana en Madrid a las 11 en el Complejo Deportivo Cultural de la Fundación ONCE, sede de entrega de estos premios, con una maleta cargada de emociones.