La normativa de la Ley Antitabaco, que entrará en vigor con el nuevo año, es un hecho que afecta, sobre todo, a los establecimientos hosteleros, por eso los dueños de estos negocios y los usuarios tienen mucho que decir. Y en Vilagarcía parece que el sentir generalizado es de apoyo.

Las protestas más conocidas son las presentadas por las asociaciones hosteleras, alegando que la prohibición de fumar reducirá su clientela y repercutirá negativamente en sus negocios. Sin embargo, los hosteleros de la villa consultados están en su mayoría a favor de la normativa, diciendo que no solo no es un inconveniente, sino que incluso puede ser ventajoso, ya que ir a una cafetería es un acto social y muchas personas que rechazan el tabaco y sus humos pueden animarse a ir más a menudo si se encuentran más cómodos.

Aunque no todo son bondades en sus declaraciones. Los comentarios que más se repiten hacen alusión, por un lado, a la inutilidad que ahora suponen las reformas de los locales que fueron necesarias con la Ley de 2005, ya que desde 2011 no se podrá fumar ni con reforma ni sin ella. Por otra parte se comentan los problemas que supone para algunos establecimientos la normativa local respecto a las terrazas, siendo éstas los únicos lugares dónde se podrá fumar.

Otra de las novedades de esta reforma es la imposibilidad de fumar en parques públicos infantiles, iniciativa que ha sido bien valorada, tanto por aquellos que son padres como por los que no, e incluso hay quiénes consideran que la protección de los menores contra los humos del tabaco debería ser todavía más restrictiva.

Hay también quien ve la nueva normativa como un aliciente para aquellos que quieran dejar de fumar pero nunca encuentran el momento adecuado para hacerlo. Por lo general, la nueva ley parece ser bien acogida por los habitantes de Vilagarcía, y tanto por fumadores como por no fumadores, siendo el mayor problema la adaptación a la nueva situación.