Portos de Galicia comenzó ayer, de nuevo, la instalación de los polémicos pantalanes de pasaje en el puerto de Vilanova, los mismos que fueron paralizados por los mariscadores el pasado mes de julio. En esta ocasión no hubo problemas, ya que se han comenzado a instalar en otro punto de la dársena de O Cabo para evitar daños a los bancos marisqueros. Una enorme grúa trabajaba ayer en la colocación de esta infraestructuras que va a servir para acoger a los barcos de pasaje que unan Vilanova con A Pobra.

El ente ordenó ayer la urgente ocupación, para los efectos de expropiación forzosa, de la antigua nave del cocedero de Charpo. Sobre sus ruinas se va a construir un nuevo vial que comunique el casco urbano con el muelle y un salón teatro dedicado a Valle-Inclán.