Los vecinos de Rubiáns están dispuestos a casi todo antes de permitir que el proyecto previsto para la Praza do Souto salga adelante. Después de haber tenido acceso al documento detallado de las obras que el Concello de Vilagarcía ha aprobado para ese espacio, representantes del colectivo vecinal de la parroquia vilagarciana han anunciado que no están dispuestos a consentir que se realicen unas obras que, consideran, hipotecarían la única zona disponible en el lugar para la realización de distintas actividades y eventos socioculturales.
A lo largo de los últimos meses los miembros de la asociación de vecinos O Souto se reunieron en varias ocasiones con representantes del ejecutivo municipal para consensuar el mejor modo de efectuar una intervención que repercutirá en el futuro de la parroquia.
La reclamación del colectivo vecinal contemplaba el acondicionamiento de la zona comprendida entre la carretera a Zamar y el centro sociocultural de Rubiáns mediante la colocación de un suelo empedrado situado en dos alturas diferentes. La intención era salvar el desnivel de casi metro y medio existente en el terreno y delimitar dos zonas destinadas a diferentes usos. La más estrecha estaría a la altura del edificio sociocultural y serviría, según los planes de los vecinos, para realizar actividades culturales como obras de teatro o otras actuaciones. La más amplia sería la correspondiente al campo de la fiesta, y se situaría al nivel de la carretera que conduce a Zamar. La idea de los vecinos consistía en la ubicación de un talud entre estas dos áreas que, por un lado, rompería la continuidad y delimitaría espacios diferentes, y por otro permitiría además crear una especie de anfiteatro natural.
El colectivo vecinal se topa ahora, no obstante, con un proyecto aprobado que recoge el empedrado de la zona a un único nivel y que, lejos de respetar la delimitación espacial propuesta, deja partido en dos el espacio en el que tradicionalmente vienen celebrándose las verbenas de la parroquia.
El presidente de O Souto no ocultaba su malestar por el hecho de que, tras las numerosas entrevistas mantenidas con los representantes municipales, estos hayan dado luz verde a un documento que recoge un planteamiento que pasa por alto las reclamaciones de los vecinos de lugar.
Abuín afirma que los miembros del gobierno local "no asumen que son meros gestores de los fondos de los vecinos", y no entiende que el proyecto haya sido modificado de esta manera a espaldas de los principales interesados.
La asociación de vecinos ha convocado para hoy mismo a toda la población de la parroquia a una asamblea urgente para informar de todo esto y concretar movilizaciones para expresar su frontal oposición al proyecto.
No obstante, los representantes del colectivo aseguraban ya ayer que no piensan quedarse de brazos cruzados y que están "dispuestos a hacer todo lo que sea con tal de parar esto". Desde O Souto dicen disponer de información que sitúa el inicio de los trabajos para mañana, por lo que instan al Concello a dar orden de paralización a estas obras o serán ellos mismos quien se encarguen de pararlas.
