La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) abre un expediente contra el Concello de O Grove que, en caso de resolverse en contra de la Administración local, puede dar lugar a una sanción de entre 600 y 60.000 euros, por una falta considera leve, y a otra que se tipifica como grave y que, en caso de confirmarse, supone pagar desde 60.000 a 300.000.

Es decir, que en el peor de los casos el ayuntamiento puede verse obligado a abonar 360.000 euros, y todo debido al enfrentamiento que desde hace años mantienen el concejal delegado de Deportes, Alfredo Bea, y el presidente del Club de Piragüismo Ogrobe, Felipe Besada Porto.

El edil, que fue máximo representante del Club Breogán y deportista olímpico mundialmente reconocido durante años –actualmente es presidente de la Federación Gallega de Piragüismo–, mantiene con Felipe Besada Porto un interminable cruce de acusaciones y enfrentamientos verbales relacionados con la actividad, o inactividad, de Piragüismo Ogrobe. Prácticamente lo acusa de ser una entidad fantasma ideada para tratar de percibir subvenciones y disfrutar de las instalaciones municipales.

Básicamente el conflicto se debe a que a nivel personal no se soportan y que, en lo profesional y lo deportivo, los dos clubes son rivales y Alfredo Bea considera que Felipe Besada no representa a nadie, por eso en su día apartó a su club del pabellón de los deportes náuticos y todo acabó en los tribunales de justicia, que como media cautelar ordenaron la readmisión provisional de Piragüismo Ogrobe.

Por el contrario, Felipe Besada entiende que su club sale perjudicado, que el concejal trata de beneficiar en exclusiva al Breogán y que usa su cargo político en beneficio personal.

Es así como salieron a relucir infinidad de acusaciones, y también datos personales y laborales. Esto hizo que Felipe Besada acudiera a la AEPD para denunciar que Alfredo Bea había aireado su vida privada sin permiso, y la citada agencia, tras las actuaciones practicadas ante el Concello y la Federación Gallega de Piragüismo, decidió abrir este expediente.

En ese informe se alude a una serie de hechos que, según la agencia, podrían suponer al menos dos infracciones por parte del Ayuntamiento, la más grave de ellas por infringir, presuntamente, el artículo de la Ley de Protección de Datos que dice que "el tratamiento de los datos de carácter personal requerirá el consentimiento inequívoco del afectado, salvo que la ley disponga otra cosa".

Por eso se considera irregular "tratar los datos de carácter personal con conculcación de los principios y garantías establecidos en la ley o con incumplimiento de los preceptos de protección".

Una vez abierto este expediente el Concello dispone de un plazo de quince días hábiles para formular las alegaciones oportunas y proponer las pruebas que precise.

La denuncia formulada por Felipe Besada ante la AEPD tiene fecha de 18 de mayo de 2009 y se refiere a una rueda de prensa ofrecida por el concejal Alfredo Bea el 21 de abril de aquel año. Aquella comparecencia de Bea fue para detallar las razones que lo llevaron a expulsar al Club de Piragüismo Ogrobe del pabellón náutico, y durante su intervención dio a conocer una serie de informaciones relacionadas con Felipe Besada, "aportando documentos que violan la normativa de protección de datos", dice el denunciante.

Entre aquella documentación había certificados, por ejemplo, relacionados con los lugares en los que había estaba empadronado Felipe Besada para acceder a licencias de piragüismo. La misma documentación "se difundió por el concejal a través de la cuenta de correo electrónico que posee en el Ayuntamiento", dice Besada.