La gran permisividad de la Administración con las redes de enmalle y el nulo apoyo que están recibiendo de ella ha motivado que los buzos agrupados en torno a la Federación Galega de Actividades Subacuáticas, más de 9.000, amenacen a la Consellería de Mar con denunciarla si continúa mirando hacia otro lado a la hora de no hacer cumplir los horarios de largada de forma estricta. Sólo en las dos últimas semanas se han registrado dos incidentes graves con submarinistas que han quedado atrapados por las redes y se ha dificultado una competición totalmente legal el domingo pasado al estar lleno el campo de la prueba de redes de enmalle cuando en teoría no podrían haber largado.

El presidente de la Federación Galega de Actividades Subacuáticas, José Senra, explicaba ayer en una rueda de prensa en Vigo que "estas situaciones, especialmente la muerte de Beatriz García Fernández, no pueden quedar impunes ni pueden volver a repetirse, por eso estamos dispuestos a llegar donde haga falta para denunciar la pasividad con la que está actuando la Administración".

El primer paso que van a dar es denunciar todas aquellas ilegalidades que ven en el mar, pues están cansados de "ser perseguidos de forma sistemática por parte de los Gardacostas mientras se está permitiendo un descontrol total en la mal llamada pesca artesanal", y la responsabilidad de este supuesto descontrol debe estar en la consellería, con Rosa Quintana a la cabeza, entiende Senra. El presidente de la federación de submarinistas recuerda que las leyes "están para cumplirlas, y estamos cansados de tener incidentes con redes que se han calado fuera de su horario".

No en vano, calar las redes de enmalle está prohibido entre las 12 horas del viernes y las 12 del domingo, pero es demasiado habitual que los submarinistas que practican buceo deportivo durante el fin de semana se las encuentren, sin señalizar y sin ningún tipo de identificación, dos cuestiones preceptivas según la normativa.

"Esta gente tiene subvenciones prácticamente por todo, sin embargo, se les permite que cometan todas las ilegalidades que quieran sin obligarles a devolver ese dinero, además de la sanción correspondiente, por lo que instamos a Quintana a ponerse las pilas ya", asegura Senra.

Tampoco exime a Capitanía Marítima de la situación, ya que entiende que Mar o esta entidad deberían tener controladas a todas las embarcaciones y sus horarios de salida de puerto, lo que permitiría "identificar, por ejemplo, al barco que caló el trasmallo en el que se enrolló Beatriz García Fernández, lo que le acabó costando la vida".

Las críticas también se dirigen hacia los integrantes del servicio de Gardacostas, a los que se acusa desde la Federación de "actuar con demasiada chulería y prepotencia contra los buzos mientras no hacen nada contra estas manifiestas ilegalidades".