El gobierno municipal de Vilagarcía dio ayer un golpe sobre la mesa y ha virado por completo el rumbo del debate generado en torno al futuro centro de salud del municipio. El edil de Xestión do Territorio, Marcelino Abuín, volvió a recuperar el protagonismo para dejar claro, con documentación y papeles sobre la mesa, que la parcela de la Comandancia cumple hoy en día con todos los requisitos urbanísticos exigidos para albergar el futuro ambulatorio. Abuín desmintió una por una las, según Ravella, "excusas" de la Xunta y Autoridad Portuaria para ejecutar un macroproyecto que, en principio, resolvería la demanda sanitaria en la localidad. Abuín ejerció como concejal y estuvo acompañado por la alcaldesa, Dolores García, y por la que lo sustituyó en el cargo de portavoz municipal, Victoria Hierro. El edil reseñó que la parcela de la Comandancia tiene una superficie de 5.000 metros cuadrados, posee unas excelentes comunicaciones, plazas de aparcamiento cercanas y que, en ningún caso está afectada por el dominio público terrestre como se ha defendido desde la Xunta. El socialista explicó con planos en la mano que para ejecutar un proyecto sanitario en la citada parcela no es necesario en absoluto modificar el Plan Especial del Puerto como defendía el presidente de la rada y que, además, la calificación urbanística con la que cuenta la parcela es idónea para el ambulatorio.

El responsable del área de Xestión do Territorio lamentó las "falsedades" gestadas en torno al futuro ambulatorio y señaló que a día de hoy sólo son necesarias unas pequeñas gestiones "que podrían llevar meses" para posibilitar la ejecución del edificio en la Comandancia. Aún así, destacó que se puede ganar tiempo e instó a la Consellería de Sanidade a "iniciar ya la redacción del proyecto mientras que nosotros realizamos los trámites que faltan para contar con la disponibilidad del terreno".

Y es que desde los bancos socialistas del gobierno local que son los que están llevando la voz cantante en el tema sanitario parecen tenerlo claro. Insisten en que la pelota está en todo caso en el tejado de la Consellería que es la que debe decidir primero si desea optar por un modelo sanitario en Vilagarcía de carácter central (un único edificio) o bien por un modelo descentralizado que consistiría en varios dispensarios repartidos por distintos puntos de la ciudad. El Concello puso ayer sobre la mesa opciones para las dos alternativas e instó a Farjas a que "asuma su responsabilidad, dado que existen terrenos como para que se pueda ejecutar un centro según el modelo que elija y nosotros colaboraremos".