Cuatro barcos bateeiros de más de 12 metros de eslora que estaban amarrados en el puerto de O Xufre, en A Illa de Arousa (Pontevedra), fueron arrastrados de madrugada por el temporal hasta la playa de Lagartiño, a causa del fuerte viento y el estado del mar.

Tras romperse los amarres de una de las embarcaciones atracadas, esta golpeó a otros bateeiros que tenía a su alrededor lo que provocó que el resto se soltara de sus amarres. Tres de las embarcaciones quedaron varadas sobre la arena de la playa de Lagartiño y otra fue arrastrada tierra adentro hasta chocar con unas rocas.

Asimismo, decenas las chalanas, dornas y planeadoras también quedaron a la deriva por los efectos del temporal, que aparecieron esta mañana amontonadas en el paseo marítimo y en las playas cercanas al casco urbano del municipio isleño.

En A Illa de Arousa, que fue el ayuntamiento más afectado por el temporal en la comarca arousana, se produjo el desprendimiento del tejado del instituto de la localidad, lo que a su vez provocó daños en edificios y vehículos.

Además, el puente de acceso a la isla tuvo que se cortado al tráfico durante unas horas a causa del desprendimiento de varios elementos que se están utilizando en las obras de mejora de esta infraestructura.

Vilagarcía de Arousa

Los fuertes vientos también provocaron numerosos incidentes en el término municipal de Vilagarcía que fueron atendidas por el personal del Servicio Municipal de Emergencias y la Policía Local. El más importante se registró en la carretera de la playa de Canelas, en Vilaxoán, donde la fuerza del mar deshizo y arrastró parte de la cimentación del malecón y donde la Policía Local mantiene cortado un carril de la circulación.

Entre las 23.00 horas de ayer y las 09.00 horas de esta mañana, los servicios municipales de emergencias realizaron un total de 42 intervenciones. La mayor parte de ellas fueron causadas por caídas de árboles que cerraron algunas calles, desprendimientos de partes de tejados, que en algunos casos dañaron a los vehículos estacionados en sus inmediaciones; y caídas de vallas, señales de circulación, farolas así como partes de andamios y barreras de cierres de obras.

Como consecuencia del viento, una patrulla de la Policía Local sufrió un accidente al colisionar contra el parabrisas del vehículo un tablón que fue arrastado por la fuerza del viento. El temporal también provocó el corte del suministro eléctrico y telefónico en varias zonas del municipio.

O Grove

En el municipio grovense, los servicios de emergencias se vieron obligados a reforzarse y la plantilla al completo de Protección Civil, compuesta por diez personas, se mantuvo en servicio para atender las llamadas de vecinos.

Las principales incidencias tuvieron que ver con caídas de árboles, principalmente en la zona de A Siradella, y desprendimientos de partes de tejados y de paneles de placas solares. En el mar, la fuerza del oleaje provocó que seis bateas quedaron a la deriva para finalmente varar en diversas playas del litoral grovense.

Varias zonas del municipio estuvieron sin luz entre las 01.00 horas hasta las 07.00 horas como consecuencia de la caída de varios postes del tendido eléctrico.

Vilanova de Arousa

Un árbol de considerables dimensiones cayó esta noche sobre una vivienda en la parroquia de San Roque do Monte, en Vilanova de Arousa. Aunque los daños materiales son cuantiosos no hubo que lamentar daños personales, ya que la familia que reside en la vivienda se encontraba durmiendo en otra habitación diferente a la que se vio afectada.

El municipio vilanovés ha permanecido sin suministro eléctrico hasta las diez y media de la mañana como consecuencias de la caída de parte del tendido. Así, la carretera de la playa de As Sinas ha permanecido cortada durante buena parte de la mañana como consecuencia de la caída de un árbol sobre el asfalto.

En el puerto muchas pequeñas embarcaciones han perdido sus amarras y el temporal las ha arrastrado hasta el litoral o ha provocado su hundimiento.

Cambados

En Cambados el aire levantó buena parte del tejado del colegio de A Pastora y se registraron la caída de numerosos árboles, uno de ellos sobre un edificio de la plaza de A Leña y que provocó algunos daños en su exterior. Otro de los árboles arrancado quedó recostado sobre la fachada del colegio de San Tomé, sin que se registran daños.