Jóvenes que quieren empezar a trabajar y que optan por tramitar el permiso de marisqueo a flote; y personas que se han visto golpeadas por la crisis económica, perdiendo sus empleos o con una merma considerable de sus ingresos...

Ambos factores parecen combinarse para explicar la "avalancha" de incorporaciones que el año próximo afronta la agrupación de mariscadores a flote de Cambados. El presidente, Carlos Martínez, explica que en la actualidad son 189, pero que las previsiones son que a partir de enero de 2010 haya más de 200 "rañeiros" autorizados para faenar en las concesiones de Cambados.

El plazo de inscripción se abre dentro de unos días, pero Martínez está convencido de que la cifra se va a disparar debido al volumen de personas que se han interesado ya por los requisitos necesarios para poder mariscar desde una embarcación. Este incremento preocupa mucho a Martínez.

"Nosotros no tenemos terreno para tanta gente, y no nos quedará más remedio que reducir los topes de captura", opina. El presidente de los rañeiros cambadeses cree que sería bueno que la Xunta fijase un número máximo de socios por agrupación y cofradía, como ocurre en el marisqueo a pie. Los rañeiros" cambadeses pueden trabajar tanto en las concesiones propias de la agrupación, como en zonas de libre marisqueo.

Proyectos de regeneración

Carlos Martínez inició en abril pasado su segunda etapa al frente de la agrupación de mariscadores a flote de Cambados. Durante la primera de las actuaciones que centraron los esfuerzos de los rañeiros fue la regeneración de O Galiñeiro.

Concluida ésta –los mariscadores están contentos con el resultado, aunque confían en que el volumen de almeja todavía esté en crecimiento–, la agrupación se propone como meta para 2009 la recuperación de una zona pegada a la escollera de Tragove y de un banco llamado Monzón, que se sitúa en las inmediaciones de O Sarrido.

En el caso de la zona de Tragove los mariscadores están vertiendo arena, mientras que en Monzón han llevado a cabo un arado del sustrato y han sembrado dos millones de alevines de almeja japónica.

Si estos trabajos de recuperación finalizan con éxito, los cambadeses podrían volver a obtener marisco de dos zonas en las que no se faenaba desde hace varias décadas. "Son lugares que se fueron degradando progresivamente con los rellenos hasta que ya no dieron nada", explica Carlos Martínez.

Y es que, según el parecer de los marineros, fueron las acumulaciones de tierra y piedras en el muelle de Tragove las que provocaron el cambio en las corrientes que poco a poco acabó con esos dos bancos marisqueros.

Saneamiento en O Sarrido

La pretensión del Concello de Cambados de aprovechar parte de los fondos anticrisis de la Diputación para acabar con los vertidos de aguas fecales y sin depurar al Saco de Fefiñáns ha sido acogido con satisfacción por el sector marisquero, ya que en las proximidades encuentra un importante banco para el marisqueo a pie.

En la Ribeira de Fefiñáns y en el Saco de Fefiñáns se encuentran dos de los principales "puntos negros" de la costa de Cambados en lo que se refiere a vertidos sin depurar en puntos de interés marisquero. En ocasiones son canalizaciones de pluviales con enganches ilegales.