Las detonaciones para abrir el trazado de la variante vilagarciana del Eje Atlántico de Alta Velocidad no sólo tienen en jaque a los vecinos de las localidades más próximas a las obras, como son Trabanca Sardiñeira, Guillán y Bamio. Desde este miércoles las explosiones repercuten en todo el casco urbano de Vilagarcía sobresaltando a la mayor parte de los vecinos.

El estruendo provocó la alarma de los habitantes de la zona, aunque la inquietud fue calmada por los técnicos encargados de las obras.

Según explicaron a los representantes vecinales para el seguimiento de las obras, el estruendo es más intenso porque los explosivos tienen que concentrarse más cerca de la superficie, dado que se está abriendo la boca del túnel en Trabanca Sardiñeira. Así la propagación de la onda explosiva es hacia afuera lo que hace que se sienta más que en otras ocasiones. Sin embargo, la carga explosiva utilizada estos días es inferior a la que se venía aplicando en otras zonas.

Los técnicos también señalaron que estos días no hicieron uso de la sirena para avisar de las explosiones a los vecinos debido al menor uso de la carga explosiva. El representante de los habitantes de la zona solicitó que se vuelva a usar la sirena para alertar a la gente de las inminentes explosiones que están causando tremendos sustos todas las mañanas. Las detonaciones se llevan a cabo puntualmente a las 9.10 horas.

Los vecinos de Trabanca Sardiñeira y de Guillán expresan que no es fácil convivir con las explosiones. En el más leve de los casos, éstas hacen vibrar hasta las ventanas de las casas. Pero ya se ha producido algún caso de incidencias de mayor gravedad, como grietas detectadas en una casa de Caldihuela, en Guillán, y otra de Trabanca Sardiñeira. De estos problemas ya se ha dado parte a la empresa encargada de ejecutar las obras de la variante del Eje Atlántico de Alta Velocidad Ferroviaria.

Los vilagarcianos tendrán al menos varias semanas de estruendos relacionados con las obras de apertura del túnel para el nuevo trazado ferroviario. Según indicaron los especialistas en la materia a la representación vecinal, el ruido de las detonaciones irá perdiendo intensidad a medida que avancen en la apertura del túnel porque los explosivos podrán instalarse en una zona más profunda, aunque éstos tendrán que incrementarse en el momento en que aparezca una piedra más resistente.

Las obras de construcción de la variante ferroviaria que mayoritariamente se ejecuta en sistema de paso inferior por el monte de Xiabre de casi dos kilómetros de longitud, se llevan a cabo al mismo tiempo en las dos bocas del túnel; una en Trabanca Sardiñeira y otra en Bamio, por lo que la repercusión en ambas localidades vilagarcianas es importante.

En lo que respecta a Guillán y Trabanca Sardiñeira, la preocupación vecinal por las explosiones crece a medida que avanzan las obras hacia las casas. Hay propietarios que van a estar situados a unos treinta metros del túnel del ferrocarril. Estos vecinos temen que en el plazo de quince días o un mes les hagan desalojar sus viviendas. De hecho, en un primer momento los técnicos que dirigen la obra indicaron esta posibilidad a la representación vecinal.

Los últimos estudios realizados sobre el terreno hacen pensar a los responsables de la obra que no va a ser necesario el desalojo dado que, al parecer, no se están encontrando con granito importante en el monte que les obligue a incrementar la proporción de explosivo para la apertura del túnel.

En las zonas más habitadas las repercusiones directas de las explosiones para la apertura del trazado ferroviario seguirán hasta el segundo trimestre del próximo año.

Salida de emergencia

Pero la variante ferroviaria, al ejecutarse mediante un túnel de casi dos kilómetros está obligada a contar con la preceptiva salida de emergencia. Esta salida inicialmente fue diseñada próxima a las viviendas de Trabanca Sardiñeira, lo que provocó la oposición de los vecinos de esta localidad ante el Ministerio de Fomento.

Tras las reuniones mantenidas con técnicos y políticos, los afectados consiguieron que Fomento se replanteara esta salida de emergencia. Los técnicos confirmaron a los vecinos que la salida anterior quedó totalmente descartada y que la nueva se va a ejecutar por la zona del monte, sin afectar a las viviendas.

La nueva salida de emergencia también necesitará de la perforación del monte mediante sistema de explosivos para formar su trazado. De todos modos, el diseño de esta nueva vía tiene que superar todos los procesos administrativos correspondientes.

El trazado para la nueva salida de emergencia será remitido al Concello de Vilagarcía y también será sometido a exposición pública para la presentación de alegaciones por parte de los afectados. Ese será el momento en que la nueva vía auxiliar se dé a conocer oficialmente.

El trámite va a requerir nuevas expropiaciones de terrenos, aunque la mayor parte de ellas afecta a la comunidad de montes.

Sin embargo, continúa el trámite de las expropiaciones acordadas para los terrenos de la salida de emergencia que quedó descartada. Fuentes del Ministerio de Fomento indicaron a los representantes vecinales que el proceso administrativo expropiatorio debe continuar hasta el final, por lo que una vez que se acabe cada uno de los propietarios afectados será llamado nuevamente. En ese momento se les consultará si quieren la devolución del terreno expropiado.

En caso de que la respuesta sea afirmativa, Fomento les pagará un "alquiler" por la ocupación de la finca desde el inicio de la expropiación hasta la fecha de devolución y los propietarios tendrán que devolver el dinero de las expropiaciones.

En el caso de que el propietario no esté interesado en la devolución de la finca, se queda con el dinero de la expropiación y el terreno pasa a la titularidad del Estado.

Paralelamente a este trámite, Fomento deberá abrir un nuevo proceso de expropiaciones ligado al nuevo diseño de la salida de emergencia. La boca de esta vía auxiliar estará situada en las proximidades del puente de la carretera de Trabanca Sardiñeira a Bamio, situado muy cerca de la circunvalación norte de la ciudad.

Las obras de la variante ferroviaria para el Eje Atlántico de Alta Velocidad a su paso por Vilagarcía estarán finalizadas en el año 2012. Los trabajos fueron adjudicados a una unión temporal de empresas, UTE, formada por Acciona Infraestructuras SA y Obras Subterráneas SA, con un presupuesto total de 126.436.774,41 euros.