La cuarenta edición de la feria multisectorial de Fexdega cerró ayer sus puertas superando, según la organización, el número de visitas previstas. Desde la entidad cifran en 21.000 los asistentes de este año que acudieron al ya tradicional salón ferial en la búsqueda de novedades vinculadas al sector de la cocina, automoción, jardín y nuevas tecnologías.

La organización afirma que las jornadas más intensas en cuanto a público asistente fueron la del domingo y la de ayer en la que, según ellos, incluso se llegaron a registrar colas en la taquilla.

De todas formas, no todos tuvieron que abonar los tres euros de entrada requeridos, dado que la entidad repartió más de 10.000 invitaciones entre asociaciones de toda la comarca de O Salnés.

A la expectativa

Los expositores que este año acudieron a la multisectorial reconocieron en todo momento estar "a la expectativa" y temerosos de que la crisis económica repercutiese en el número de asistentes. La cifra aportada por la organización, ligeramente inferior a la de años anteriores ha agradado a todos los implicados en este gran salón que ha gozado del empuje evidente de la multitudinaria Festa do Marisco que este fin de semana se clausuró en O Grove.

Continuidad

Fexdega clausuró así sus puertas con la esperanza de continuar en la misma línea los años venideros. Al menos eso es lo que garantizó el conselleiro de Economía e Industria, Javier Guerra, el día de la inauguración de la Multisectorial silenciando así los rumores a voces que se hacían públicos los últimos años acerca de la posible desaparición de este tipo de eventos feriales.

Las casetas más visitadas a lo largo de los cuatro últimos días en el recinto de A Maroma han sido las del mueble, productos de cocina y sector de la automoción. Todos los expositores coincidieron este año en ofrecer ofertas especiales adaptadas a todos los bolsillos, especialmente aquellos más resentidos por la crisis. De todos modos, su principal objetivo ha sido el de escaparate, más que el de la venta directa en sí.