Manuel Méndez  Arousa

Galicia se prepara para disfrutar y saborear una nueva campaña del centollo, o de la centolla. Dentro de justamente una semana las primeras piezas empezarán a llegar a puerto y a las lonjas de forma legal, con lo que mercados y cocinas se reabastecerán de este preciado y cotizado crustáceo.

Los armadores y marineros afrontan con escepticismo el nuevo "curso", a causa de la creciente acción de los furtivos, que llevan semanas, por no decir meses, extrayendo producto de forma ilegal. En cualquier caso, la flora debe estar lista "para lo que venga", por eso desde hoy hasta el lunes próximo cientos de profesionales se ocuparán de acondicionar los miños, un arte de pesca similar al trasmallo que es empleada de forma intensa para la centolla.

Buena parte de las embarcaciones que actualmente capturan diversas especies haciendo uso de nasas, betas y otras artes proceden a cambiarlas y a dejar sitio en cubierta para esos miños que, empleados también para la captura de chopo, alcanzan su momento álgido con la campaña del centollo.

Ésta se abrirá el lunes y se cerrará el 31 de diciembre, por aquello de que los planes de extracción y explotación que elabora la Xunta deben hacerse con carácter anual. Pero en realidad la campaña no se detendrá y continuará desde el 2 de enero -dentro ya del plan de explotación de 2009- y se prolongará hasta finales de junio, por lo que en la práctica puede decirse que el lunes empieza una campaña global de poco más de siete meses.

En la anterior, desarrollada entre octubre de 2007 y el 30 de junio de 2008, las lonjas gallegas subastaron 209 toneladas de centolla, con una facturación global cercana a los 3 millones de euros. El precio máximo fue de 64 euros el kilo y el medio se situó en 13,18 euros, a finales de 2007 -coincidiendo con la campaña de Navidad-, mientras que se marcó un tope de 54 euros y una media de 13,96 euros el kilo en el primer semestre del ejercicio actual. Estos datos confirman que la centolla es una especie importante en Galicia, lógicamente en unas rías con más presencia que en otras.

Reparto por zonas

A modo de ejemplo, cabe indicar que en la campaña anterior -desde octubre de 2007 a finales de junio de 2008- las lonjas de Arousa vendieron 66 toneladas de centolla, con una facturación de algo más de un millón de euros. Las rulas de la ría de Vigo comercializaron en ese período 26,5 toneladas, ingresando por ello 341.120 euros, mientras que las de Pontevedra subastaron 20 toneladas (226.000 euros) y en Costa da Morte se quedaron en poco más de 13 toneladas (158.000 euros).

Por su parte, en el citado periodo se vendieron 41 toneladas en la zona de Coruña-Ferrol, con 467.000 euros facturados, y apenas 4 toneladas en Cedeira.

La ría de Arousa es la principal comercializadora

La centolla encuentra su hábitat principal y su mejor plataforma de comercialización en la ría de Arousa.

Prueba de ello es lo ocurrido con el arranque de la campaña anterior, cuando entre finales de noviembre y el 31 de diciembre de 2007 las lonjas arousanas vendieron más de 29 toneladas de este producto. En poco más de un mes se subastaron casi 13 toneladas en la lonja de O Grove, 10 toneladas en la de Ribeira y 5,5 toneladas en Cambados, siendo éstas las referencias indiscutibles de la ría en lo que a primera venta de centolla se refiere.

En esa recta final de 2007, cuyos resultados podrían extrapolarse a la campaña que arranca el lunes que viene, O Grove facturó 244.000 euros por la venta de este producto, mientras que Ribeira ingresó casi 128.000 euros y Cambados obtuvo 93.000 euros más.

Así pues, a partir del lunes habrá que prestar especial atención a la extracción y venta de esta especie, cuyos precios, a priori, puede que sean altos a causa de la previsible escasez. En el sector opinan que "no habrá demasiadas capturas", pues como los propios marineros indican algunos de sus "compañeros" llevan meses "esquilmando los caladeros" mediante la pesca furtiva de esta especie.

A finales de 2007 el precio máximo fue de 71,70 euros en Cambados, 48 en O Grove y de casi 40 euros por kilo en Ribeira, destacando el precio medio de 20,16 euros marcado en el puerto grovense