Mª José Barreiro / Vilagarcía

Cerca de cuatrocientas personas acudieron en la mañana de ayer, al reparto de alimentos llevado a cabo por el sindicato Unións Agrarias en Vilagarcía, como medida de protesta ante el abusivo aumento de precio que sufren los alimentos desde que son vendidos por el agricultor, hasta que son adquiridos por los consumidores.

Los viandantes que se acercaban a media mañana a la avenida da Mariña recibían una bolsa de cartón con una lechuga, tomates y pimientos, ya que según afirmaban los responsables de Unións Agrarias, "es mejor regalarlo que venderlo por una miseria a las áreas comerciales"

Según han explicado miembros del sindicato, los pequeños agricultores se ven obligados a vender los productos a un precio, en ocasiones inferior al que les cuesta producirlos, por la presión que realizan las grandes superficies comerciales, quienes pagan una miseria por kilogramo al trabajador del campo. Según explican se ven obligados a vender el producto porque si no lo hacen, pierden la cosecha.

Lo grave de la situación es que esos mismos productos posteriormente se venden en los supermercados con una subida, en ocasiones, del quinientos por cien.

Ante esta situación que califican de insostenible, los agricultores exigen una regulación de los márgenes comerciales que permitan precios justos tanto para los productores como para los consumidores, evitando un incremento que únicamente favorece a las grandes áreas comerciales.

Los miembros del sindicato exigen además, un doble etiquetado que muestre los precios de origen de los productos y el de destino, con la correspondiente denominción de origen de los mismos, para que el consumidor final tenga claro de donde procede lo que consume y lo que incrementa el precio a lo largo del proceso.

Ante la gravedad del problema, Unións Agrarias mantuvo conversaciones la mañana de ayer con varios representates de los sindicatos de la zona, quienes afirman que los agricultores y ganaderos necesitan más garantías. Piden impulsar la implantación de códigos de buenas relaciones comerciales que autorregulen las relaciones entre los distintos entes que intervienen en la cadena alimenticia, a la vez que intentan promover una normativa que incentive las relaciones contractuales en las que se garantice que el precio que reciben los ganaderos y agricultores cubrirá al menos los gastos de producción.

Durante la jornada de ayer, el Agrobús situado en la avenida da Mariña, repartió folletos informativos a la ciudadanía con la intención de poner en su conocimiento el problema, a la vez que recogían firmas para apoyar la protesta, que de algún modo afecta a todos.

Por su parte, los arousanos, manifestaban estar totalmente de acuerdo con los cambios que proponía el sindicato, a la vez que se quejaban de la gran subida de los precios que en los últimos tiempos se está registrando en la cesta de la compra.

El autobús recorrera diversas ciudades gallegas.