Las ansiadas obras de ampliación del Hospital Comarcal do Salnés no empezarán el día 1 de julio. El centro hospitalario estima que, por el número de pacientes que en estos momentos siguen ingresados en la segunda planta, es previsible que los trabajos propiamente dichos se retrasen hasta cerca del 10 de julio.

En estos momentos, y según los datos facilitados por el propio complejo, sólo 11 de las 42 camas de la sección de Medicina Interna están vacías por lo que 31 pacientes tendrían que ser dados de alta en tres días para que las obras pudiesen empezar con normalidad. Desde el Hospital estiman que los pacientes de este área puedan volver a sus casas en un período máximo de 15 días o que, al menos, estos puedan ir reubicándose en la primera planta del hospital comarcal, eso en caso de que en este piso queden camas libres.

Pasos a seguir

Las pretensiones iniciales del centro hospitalario eran cerrar el martes la segunda planta por completo con la finalidad de facilitar a los operarios la ejecución de una tercera. Desde el Hospital señalan que, de momento, no está previsto un desalojo propiamente dicho sino que se espera que los pacientes aún ingresados puedan ser dados de alta paulatinamente. Lo cierto es que las personas que acuden estos días al servicio de urgencias del centro hospitalario ya reciben un folleto informativo en el que se les indica que cualquier nuevo ingresado será derivado al Complejo Hospitalario de Pontevedra, bien en el Provincial o en Montecelo.

En principio no se prevé que este pequeño retraso impida que los trabajos de apuntalamiento del futuro tercer piso estén terminados a finales de verano de modo que, previsiblemente en otoño, pueda abrirse nuevamente al público la segunda planta de modo normalizado y recuperar así los servicios prestados.