A. G. / O Salnés
Además de mágico, San Xoán es también tradición, y en las hogueras no puede faltar un elemento gastronómico básico como es la sardina, un producto cuya demanda suele dispararse con la proximidad de esta fiesta. De hecho, la sardina fue ayer el producto más solicitado por los clientes en las plazas de abastos de la comarca de O Salnés, aunque este hecho no influyó en un incremento exagerado de los precios.
El kilogramo de esta especie osciló entre los 3 y los 6 euros dependiendo de su procedencia y su calidad, unas cifras que no desentonan en absoluto con los que se han manejado en los últimos tiempos. Fueron muchas las personas que se acercaron a las plazas de abastos de la comarca, especialmente las de O Grove y Vilagarcía para hacer acopio de sardinas de cara a la noche mágica que se celebra mañana.
Aunque no se agotó por completo en algunos casos, la mayor parte de los vendedores de las plazas de abastos vendieron casi toda la producción que habían adquirido para esta jornada, en la que la sardina era un elemento esencial en las bolsas de la compra de las personas que acudieron a comprar.
El vilagarciano Eduardo Abad Sabariz, presidente de Upta-Galicia, reconocía ayer que la sardina que se comercializó ayer se encontraba a un precio "razonable y asequible para el consumidor", destacando además la calidad del producto, especialmente de aquella procedente del "xeito".
También en O Grove, la sardina se vendió a un precio más que razonable para el consumidor, reconocía la presidenta de la asociación del mercado municipal de O Grove, y se convirtió en uno de los productos más demandados por los clientes. "Muchos querían hacer acopio para el lunes, aunque aguardamos que en esa jornada haya sardina para vender", señala Cao.
Permiso especial
La propia Consellería de Pesca ha otorgado un permiso especial a la flota que se dedica a la captura de la sardina para que pudiesen llenar de sardina las lonjas y plazas de abastos con vistas a la celebración de las hogueras de San Xoán, un permiso que se puede volver a otorgar mañana, permitiendo a aquellos que todavía no han adquirido las sardinas para degustar durante la noche más mágica del año este producto gastronómico.
