La red de suministro de agua potable de Vilagarcía se vio afectada ayer por una avería en las obras de la nueva tubería de impulsión. El incidente ocurrió en horas del mediodía, por lo que la empresa encargada de las obras y del suministro del servicio, Espina y Delfín, optó por acometer la reparación sin realizar corte de agua.

Las obras de la nueva tubería de impulsión desde el río Umia están en la actualidad en las proximidades de la depuradora de agua potable de Trabanca Badiña. Fue en este punto cuando los operarios, al romper para enterrar la nueva tubería picaron uno de los caños de la red actual, según señalaron fuentes municipales.

Dado que a la hora en que ocurrió el incidente en las obras se registra uno de los mayores consumos de agua en la ciudad, la empresa optó por reparar la red sin efectuar ningún corte en el suministro, lo que dificultó las obras.

Este tipo de actuación no logró impedir que se filtraran materiales como áridos y tierra en las tuberías. El agua pasó previamente por la depuradora; sin embargo ésta no pudo filtrar todos los residuos por lo que el líquido con turbidez llegó a la red principal.

Una vez reparada la avería, la empresa optó por abrir los hidrantes de la ciudad para depurar la red, lo que llamó la atención de los transeúntes.

Esta actividad, que se prolongó hasta la tarde, pudo haber causado en las zonas más altas del municipio una bajada de presión en el suministro del agua, así como una mayor turbidez en el agua, que parecía chocolatada. El problema en el servicio se solucionó completamente a media tarde.

Las obras de instalación de la nueva tubería de impulsión desde el río Umia llegan a su fase final con la conexión a la depuradora.

Los trabajos, financiados mayoritariamente por la Xunta de Galicia, se completan con otra nueva red para conectar con la Mancomunidad de Aguas del río Ulla.