En las localidades vilagarcianas de Lago y Rubiáns de Arriba ha vuelto a saltar la alarma vecinal como consecuencia de las obras del acceso directo del Puerto a la autopista AP-9. El malestar de los habitantes de estas zonas se basa en el inicio de la ejecución de un vial complementario a las obras, al que expresaron desde el principio su oposición, y que técnicos de Carreteras del Ministerio de Fomento, entidad promotora de esta infraestructura, se habían comprometido a dejar sin efecto.

Para sorpresa de los vecinos, el pasado miércoles las máquinas de la empresa que ejecuta las obras del vial portuario comenzaron el desmonte del terreno para perfilar el vial complementario que la gente de Lago y Rubiáns de Arriba ya daba por anulado.

Los vecinos se dirigieron a quienes ejecutaban los trabajos reclamando su inmediata paralización, pero como las obras continuaban decidieron recurrir a la mediación del portavoz del grupo municipal de IU, Juan Fajardo. El edil de IU había mediado en su día a favor de la reivindicación de los vecinos y estuvo presente en la reunión en la que técnicos de Carreteras del Estado se comprometieron a no ejecutar el vial complementario al que se oponían los habitantes de la zona.

Fajardo se reunió con los vecinos afectados y constató "in situ" la acometida de las obras que ya se daban por anuladas, por lo que cursó una llamada urgente a la alcaldesa de Vilagarcía, Dolores García Giménez, con el fin de que desde la Alcaldía se inste al Ministerio de Fomento a paralizar los trabajos cuestionados.

Asamblea vecinal

Por otra parte, la directiva de la Asociación de Vecinos "O Souto" de Rubiáns, convocará una asamblea el domingo, día 8, con el fin dar a conocer a todos los planos de la canalización de las aguas procedentes del monte y del vial de acceso portuario. El estudio realizado por los técnicos y entregado a la alcaldesa esta semana, tiene como objetivo poner fin a los problemas de inundaciones que sufren las propiedades más próximas cada vez que llueve fuerte, como consecuencia del agua que, como un torrente, sale del vial.

Las soluciones técnicas expuestas en el proyecto inicial resultaron ser insuficientes; algo que quedó demostrado con las últimas precipitaciones pluviales.