El Concello apoyará la reivindicación de UGT, CC OO y CIG a fin de conseguir un solar en los terrenos públicos de O Cavadelo dónde construir la nueva sede de las organizaciones sindicales asentadas en la actualidad en un viejo edificio de la calle Alexandre Bóveda.

Así se lo aseguró la alcaldesa, Dolores García, a los representantes de los tres sindicatos en la reunión que mantuvieron en la mañana de ayer en las dependencias municipales. Comisiones Obreras estuvo representada por Ramón Bueno, la CIG por Xosé Xoán Aboy y UGT por José Vázquez. En dicha reunión, la alcaldesa socialista les trasladó el deseo del gobierno local de que las centrales sindicales cuenten con una sede amplia y en condiciones para el desarrollo de su "importante labor social".

La primera de las reuniones que Dolores García mantiene con los principales representantes de los sindicatos vilagarcianos, no sólo le sirvió para mostrarles su apoyo a su proyecto de trasladar la sede a la parcela de O Cavadelo. También la aprovechó para analizar con ellos las posibles actuaciones que se pudieran llevar a cabo desde la Administración municipal vilagarciana a fin de llevar la pretensión a buen término.

Al concluir el encuentro, la alcaldesa explicó que el primer paso será contactar con los distintos organismos de la Administración estatal implicados en el proceso de cambio de titularidad de la parcela.

Cabe recordar que los terrenos de O Cavadelo en los que los sindicatos pretenden que se construya la nueva sede son patrimonio del Estado, que tiene intención de venderlos en concurso público aprovechando la calificación urbanística con la que cuenta, que permitiría la edificación de hasta 70 viviendas en una parcela muy céntrica, ubicada detrás de los edificios del Juzgado y Comisaría. Y por otro lado, el edificio en el que tienen sus sedes UGT, CCOO y CIG está bajo la tutela del Ministerio de Trabajo. Partiendo de esta base, el gobierno local y los técnicos municipales se comprometieron a estudiar las alternativas existentes a fin de apoyar la reivindicación sindical del modo "más rápido y eficaz".

Las tres centrales llevan tiempo realizando gestiones para permutar sus actuales instalaciones, que se le han quedado pequeñas para desempeñar su labor y que carecen de servicios de accesibilidad. En 2004 consiguieron autorización del Ministerio de Trabajo para usar el edificio de Alexandre Bóveda como moneda de cambio e iniciaron la búsqueda de una parcela adecuada para su nueva sede. Las tres coincidieron en la conveniencia de que fuese la de O Cavadelo pero la delegación de la Agencia Tributaria les indicó que la cesión no podía ser requerida por un sindicato. Debía hacerlo una administración pública y de ahí la implicación del concello vilagarciano.