El Centro Obrero ofreció cobijo a numerosos gremios y colectivos, pero siempre acogió con mucho calor al sector campesino. Primero nació la Federación Agraria Local y, más tarde, la Federación Agrícola Comarcal. Allí celebró su asamblea constituyente el 29 de diciembre de 1930, y desplegó una meritoria actividad hasta que la Guerra Civil truncó su labor incesante.
La nueva federación agrupó el mundo rural de los municipios de Pontevedra, Vilaboa y Geve (entonces todavía ayuntamiento) y la asamblea contó con una participación muy numerosa de las delegaciones parroquiales.
Los estatutos elaborados por la comisión organizadora obtuvieron un respaldo unánime. Otro tanto ocurrió con su primer comité ejecutivo, que encabezó José Orozco, de Salcedo, a quien acompañaron Manuel Ruibal, de Lérez, como vicepresidente; Manuel Dios, de Geve, como secretario; Manuel Iglesias, de Campañó, como tesorero, y Ramón Meis (Campañó), José Cerqueiro (Vilaboa) y Manuel Loureiro (Tomeza). Los principales núcleos vecinales estuvieron convenientemente representados.
