No es fácil encajar una noticia como la que recibí a primera hora de la mañana. Se hace el silencio, te sientes pequeño en la inmensidad, piensas y te das cuenta de que hoy estás y mañana ya no, de que la vida y la muerte están separadas por un estrecho hilito que se rompe en un segundo. En días como hoy no es fácil describir con palabras qué se siente cuando se pierde a un amigo.

Dicen que un amigo es aquel que está contigo en las buenas y en las malas. Cuando perdemos a un amigo sentimos como si se nos fuera un hermano. Se me hace difícil aceptar que es verdad la noticia de su fallecimiento. Quisiera que todo fuera una broma de mal gusto, pero, lamentablemente, no es así. Ricardo era mi amigo y pariente. Ricardo era una persona desinteresada, generoso, optimista y muy inteligente. Ricardo era una persona memorable, noble, sencilla y maravillosa, su muerte nos ha dejado un gran dolor y un gran vacío en el corazón de todos aquellos que le tratamos, ya que para todos tenía una huella de cariño, comprensión y disposición para ayudar. Un amigo excepcional, un excelente amigo que siempre daba consejos en los momentos difíciles. Ricardo era una persona de una calidad extraordinaria, muy discreto, nunca presumía de sus logros ni de sus conocimientos y siempre estaba dispuesto a echar una mano. Dicen que algo se muere en el alma cuando un amigo se muere. Hoy es verdad, me quedan los recuerdos de nuestros paseos, con el amigo Touceiro y nuestras largas e interesantes conversaciones.

Ricardo estudió humanidades, emigró a Brasil, trabajó como periodista en El Ideal Gallego y en Onda Cope de Lugo y, sobre todo, trabajó mucho y bien para el pueblo de Lalín, desde el Ayuntamiento, y para los mayores de nuestro pueblo desde la Residencia de Nuestra Señora de los Dolores. Es el autor de la letra del Himno de Lalín. Siempre contaba la anécdota de que el alcalde Sr. Cuiña le quería encargar la letra a un escritor importante. Ricardo escribió la actual letra y se la enseñó al maestro Rogelio Groba, que la consideró la letra perfecta para la música que tenía pensado para el Himno de Lalín. El pueblo de Lalín tiene mucho que agradecerle Ricardo.

Como homenaje recordamos la letra del Himno de Lalín, que le acompañará para siempre y le hará inmortal: Patria dos bos e xenerosos, / terra de liño e de lan; / futuro do tempo ventureiro, / de Breogán, fogar.../ Sabios, canteiros e pintores, / poetas, labregos e demais; / Lalín, "con razón ou sin ela", / a facer Galicia está... / Lalín, pobo rexo e forte, / dende o Faro ata o Candán; / xuntos, xunguidos pola vida / por todo o mundo, irmáns... / Lalín dos bos e xenerosos /e do galeguismo, altar; / os de Lalín sempre seremos / Fillos de Breogán... / Os de Lalín sempre seremos / Fillos de Breogán.