Di un salto a Salamanca y, tras aposentarme ante el Tormes del Lazarillo, mirando la catedral crucé el puente romano, subí por la empinada calle Tentenecio que a duras pena asciende cada año el paso de Nuestra Señora del Amor y de la Paz en Semana Santa y, atravesando la Plaza Mayor, llegué a La Flor del Tiempo, el bar de Charo González en la Plaza del Campillo. Allí quedé con un vigués de adopción porque fue un puñado de años delegado en Vigo de la ONCE, Agustín Ledesma, vuelto a su Salamanca natal pero con cada rincón de Vigo en su memoria. ¡Qué tiempos aquellos suyos en los que la ONCE tenía en Carnaval su comparsa! Agustín me habló de Bea Carballo, visitadora médica viguesa que vive en Salamanca cuya hermana Tita abrió estos días en Vigo La Casa de Tita en la calle Fotógrafo José Gil, 8, junto a Balaídos. La Flordel Tiempo es un bar de tapas pero tiene tras su barra las manos virtuosas de Charo, que si un día me regala unas setas cogidas entre los pinares de Topas, otro unas marujas arrancadas en Gredos. La Charitísima nos puso una tapa de cocido castellano en un pequeño cuenco con lo básico y me pregunté cómo no lo aprovechamos así en Galicia, dispuesto con sus tajadas esenciales como tapa del día. Pero es que luego vinieron unas "mollejas de cordero con foie al estilo de Charo" que nos obligaron a recitarle una oda de loa y alabanza culinaria.
Adiós Carnaval, viva la ceniza
Hoy, que es Día de los Enamorados, pero coincide con Miércoles de Ceniza, en que nos recordarán cuando nos la pongan en la frente que somos polvo y al polvo volveremos, también es primer día de Cuaresma y ayuno, y a ver cómo conciliamos el amor enamorado y la continencia eclesial. Hoy, cuando en Ourense intentan sobrevivir a la resaca nocturna del bestial lunes de Carnaval, en Vigo, que somos carnavalescamente más tranquilos, enterraremos "o meco" para despedirlo y sabremos los ganadores del desfile de comparsas. Por el centro andarán "Os Tarteiras" animando el cotarro, tras la resurrección con fuerza de la tradición de "Os Merdeiros". Adiós, Carnaval.
Santiago y cierra España
Fue entre otras cosas periodista de FARO, yo creo que en los años 50, hasta que decidió marcharse a Estados Unidos y allí hizo notable carrera como catedrático de Literatura Española. Desde allí, por suscripción online, Santiago Vilas sigue la marcha de su Vigo natal por nuestro periódico, y el otro día le sorprendió el espacio que dimos al aniversario del aeropuerto vigués, que le trae tantos recuerdos. Claro, a él le tocó informar para FARO de su inauguración en abril de 1954, aunque me dice que ya funcionaba extraoficialmente como prueba que participó dos meses antes en un vuelo junto al fotógrafo Tomás Cardenal y otros periodistas, entre los que me parece ver a Manuel Tourón, en la foto que me envía, invitados en un avión que puso el embajador americano para que contemplaran Vigo desde el cielo. Pocos habrían vivido antes esa experiencia aérea.
Qué pinturas las de Quesada
Se nos fue Antonio Quesada en Vigo en 2015, es cierto, pero podéis visitar la exposición de su mejor obra comisariada por Pilar Cendón en el Centro Cultural Afundación, bajo el mismo teatro. De Antonio tengo un cuadro en sitio de honor en mi casa, y de los hermanos Quesada le hemos hecho sus Memorias al menos a dos, al mismo Antonio, que vivía en Vigo, y a Heriberto, en Madrid.
En honor a Castro
¡Pardiez Mateíllo, cómo luces haciendo de Castro al calor del Carnaval! Este que veis y que tan bien imita al inolvidable vendedor de periódicos con estatua en Príncipe, aquel Castro capaz de hacer equilibrios imposibles con nuestros ejemplares, es Mateo Janeiro, hijo de Guillermo, nieto de Manuel y que su abuela Marta Alfageme, querida en nuestra memoria, no pudo ver crecer. Nunca tuvo Castro mejor imitador y tan joven admirador de su arte.
