Hay que prepararse para el Entroido que viene. Eliminada el pasado viernes la gran bola de navidad que adornaba la Plaza de España, las comparsas ya tendrán donde tomar la foto tradicional con fondo de la farola y no pasará como un año en que tuvimos la "suerte" de sacar unas fotos curiosas pasando el nazareno del Jueves Santo por debajo de los arcos de la navidad. Y el programa es completo. No difiere mucho del de años anteriores pero, al menos no decae y eso es bueno porque habrá días con mucha animación que beneficiará a la economía local con toda seguridad. Este año contamos, además, con otros dos acontecimientos que serán sendas primeras piedras para el futuro. Uno es la exposición de camelias que durante la jornada de ayer y todo el día de hoy, pueden verse en las salas del Museo Torres, una preciosidad de colorido y naturaleza que nadie con sensibilidad por el arte y por la flor de invierno, debe perderse. La otra novedad de este mes es el comienzo de los "cantos de taberna" y la presencia los fines de semana por los bares de Marín de ese animoso grupo "Os Saljariteiros" a los que sobra buen humor y empatía con el pueblo disfrutando de su música y su canto más popular e invitando a todos a pasarlo tan bien como disfrutan ellos en cada salida. Los más cenizos se empeñarán en seguir diciendo que en Marín no hay nada. ¡Ay Dios meu; non temos remedio!

Dos: La alineación