Una tarde de un mes cercano al inicio del verano de hace casi 15 años, repicaron las campanas de la iglesia de San Esteban de Noalla convocando a los vecinos de la parroquia.
El motivo de tan inusitada convocatoria no era otro que, por parte del Concello, se estaba procediendo a colocar unas vallas con las que, de manera provisional, impedir que ese verano ya próximo a comenzar, se estacionasen vehículos en la zona de dunas cercana a la carretera, tal y como venía sucediendo hasta entonces.
A la cita acudieron en torno a un centenar de vecinos decididos a impedir tal actuación municipal. Para ello trataron de persuadir al concejal responsable, allí presente, para que desistiese de llevar adelante la misma.
Tras el correspondiente rifi-rafe dialéctico y el consiguiente sabotaje nocturno a lo ya realizado aquella tarde, la iniciativa municipal fue tomando cuerpo poco a poco en los días siguientes, empleando para ello grandes dosis de concienciación entre los opositores al proyecto.
Bolardos de madera y muchos metros de cuerda sustituyeron a las vallas metálicas y a la cinta inicialmente colocada, y ya aquel verano empezó a visualizarse una importante mejora en el respeto medioambiental de la zona. Fruto de todo ello, en las playas de Foxos, A Lapa y Area Gorda ondeó por primera vez la bandera azul.
Con el paso del tiempo, aquella iniciativa municipal se fue perfeccionando y fue así como el entorno de las playas y de la ermita de A Lanzada se dotaron del circundado de madera y cuerda que a día de hoy todavía conserva.
Últimamente estamos viendo como los agentes atmosféricos se oponen a una nueva actuación en la zona. En mi opinión, no les falta razón. Creo que el proyecto peca de exceso de madera y que sobra la instalada en aquellos espacios con anchura suficiente para efectuar otro tipo de actuación, al estilo de la senda costera entre Paxariñas y Montalvo, o la realizada en Major por la Comunidad de Montes de Noalla.
El tiempo se ha encargado de mostrar la razón de ser y la visión de futuro de aquella actuación en A Lanzada, motivo de la reseñada movilización vecinal. En esta ocasión ha sido la naturaleza quien se ha manifestado. Y ahora, al igual que entonces, sería bueno escucharla?
