Ahora que es noticia que en Barcelona andan incendiando autobuses con turistas como ataque a una de las industrias que ha salvado una buena parte de los puestos de trabajo en la crisis reciente y que constituye una de las industrias de mayor peso específico en la producción nacional, creo que es conveniente repasar algunos aspectos sobre lo que representa en nuestra estructura económica y si las descalificaciones que van in crescendo por parte de una determinada clase política que parece ver que la economía cae del cielo como una especie de maná, tiene sentido, frente a los creen que lo que se tiene es el resultado del arduo y acertado trabajo.
Galicia está progresando como destino turístico que viene ayudado por un claro amejoramiento de las infraestructuras no sólo de acceso, sino que la oferta hotelera, los recursos de ocio combinados como el sol-playa, gastronomía, parajes naturales, grandes recursos culturales, aún a precios competitivos, ofrecen al visitante una amplia gama de posibilidades de ocio que contribuye a una más que aceptable fidelización por lo que escuchamos que casi siempre la gente repite.
La accesibilidad por carretera, por avión con tres aeropuertos, por tren con una clara mejoría de la oferta ferroviaria que aún está por mejorar más con el AVE, está permitiendo confiar que Galicia es segura como destino vacacional y por tanto el turismo progresivamente va constituyendo una pieza importante en la estructura económica de nuestro país.
En el informe de Economía Galega que cada año publica el IDEGA con el patrocinio de ABANCA y el IESIDE, referido al 2016, recientemente divulgado, se indica que se ha producido un récord histórico de visitantes, aumentando significativamente no solamente el número de estas visitas, sino el período medio de las mismas. Asimismo, poco a poco se está incorporando a la demanda de los nacionales, visitantes de otros países que con un fuerte incremento ya constituye el 28% del total, por lo que la potencialidad de crecimiento aún es muy alta, a tenor del grado de satisfacción medio que tienen los clientes del sector turístico en Galicia.
Si, es verdad como indica claramente las conclusiones del estudio citado, aún persiste la estacionalización de las visitas, centradas intensamente en el período vacacional veraniego y que las estancias medias aún tienen que mejorar mucho. Además, estimo que debemos persistir en la senda de la calidad como estrategia.
*Economista
